Hace 12 años | Por The_Capsules a publico.es
Publicado hace 12 años por The_Capsules a publico.es

Mariano Rajoy tiene numerosos problemas económicos a los que hacer frente cuando llegue a la Moncloa, pero su agenda ya demuestra cuál es su prioridad: los banqueros. De momento, en su primer día como presidente electo, el futuro presidente recibió ayer al presidente de Bankia y exministro de los gobiernos de Aznar, Rodrigo Rato, con el que conversó durante algo más de dos horas. También el presidente del BBVA, Francisco González, con el que además le une una estrecha amistad.

Comentarios

osmarco

Pues normal, no?, que se esperaban los votantes de un partido de Derechas, que iban a facilitar las cosas a la clase obrera?. Pues NO.

hamijo

#2 Acaso alguien te ha asegurado que las negociaciones con los bancos no sean para buscar soluciones para la crisis y por tanto para los ciudadanos?

De todas formas no se porque dices lo de derechas y la clase obrera, cuando hemos tenido un gobierno durante ocho años que de la clase obrera más bien se ha acordado poco.

osmarco

#3 Por eso lo digo, si con un partido Socialista, se han pasado por los forros a los obreros, que esperar de un partido de derechas.

cyberdemon

#6
PSOE = Centro derecha corrupta
PP = Derecha rancia corrupta
Otros = Esperando su turno para desplegar su corrupción y corrompiéndose con las migajas que les dejan

b

#1 #2 Hombre, está feo llegar al gobierno y negarle una cita a los íntimos como Rato.
Yo creo que debería centrarse más en las órdenes de Europa, y que oiga, pero sin priorizar, a los chupasangres, que cuando llega la hora de hacer su función (véase Bankia con el Banco de Valencia), se hacen los suecos, otorgándole el marrón al Banco de España, que se encarga entonces de intervernir y sanear.

hamijo

Bueno y...?
Se supone que hay que arreglar problemas de tipo económico, si les parece mal entonces tal vez debería reunirse con el chino del todo a 100 de la esquina.

D

El dia que pasemos de manifestaciones a saquear supermercados y grandes almacenes nos van a oir.