Un periodista que sigue el caso revela que el fundador de los Legionarios de Cristo repartió sobres llenos de dinero y mantuvo un esquema financiero mediante el cual mantenía su influencia en el entorno de Juan Pablo II. El dinero de Maciel aseguraba el apoyo de tres figuras clave: los cardenales Angelo Sodano, secretario de Estado del Vaticano de 1990 a 2006; Eduardo Martínez Somalo, prefecto de la Congregación para los institutos de vida consagrada y sociedades de vida apostólica, y Stanislaw Dziwisz, secretario particular de de Juan Pablo II
Comentarios
Ya se intuía que Angelo Sodano, demasiado «mundano» para ser un buen cardenal, no era trigo limpio. Si él aceptaba los regalos de un tipo como Maciel y Ratzinger no, se confirman mis impresiones negativas respecto al primero y positivas respecto al segundo.
"..En el reportaje se establece que Joseph Ratzinger -el actual Papa- fue uno de los cardenales que no aceptaba regalos de Maciel. A su vez, se cuestiona si Juan Pablo II supo o no la manera en que Maciel engrasaba la maquinaria en el Vaticano.."
Que no habrá hecho un "socerdote" como Maciel capaz de abusar sexualmente hasta de sus hijos.