[c&p]Al contrario que su marido impasible, Nancy Garrido, de 54 años, lloraba y escondía su rostro durante la primera comparecencia la semana pasada tras el descubrimiento de Jaycee Dugard, secuestrada cuando tenía 11 años y retenida en el fonde del jardín de su casa.
También la británica Myra Hindley, condenada en 1966 por la muerte y tortura de cuatro niños, tenía una pasión por el magnetismo de su pareja Ian Brady, que le hacía leer a Sade y a Hitler y le llamaba «Hessy», en alusión a Rudolf Hess.
Nancy Garrido, llevada por la pasión de los testigos de Jehovah, ha podido estar fascinada por Phillip Garrido, que pretendía hablar con la voz de Dios.
Es tán culpable como él, no vengamos a defenderla a ella ahora por ser mujer. Esta mujer conducía el coche en el que se llevaron a la niña y jamás ha denunciado en 18 años sabiendo que la violaba su marido día sí y día también. Ahora que no venga llorando lágrimas de cocodrilo, que le ha jodido la vida a bastantes personas, sobretodo Jaycee. A la cárcel de por vida hasta su muerte por vejez para ella y su marido, culpables al 50%. Yo les haría otra cosa, pero me ahorro el comentario.
Comentarios
Leer la noticia porque no es dupe
#1 Lee d
También la británica Myra Hindley, condenada en 1966 por la muerte y tortura de cuatro niños, tenía una pasión por el magnetismo de su pareja Ian Brady, que le hacía leer a Sade y a Hitler y le llamaba «Hessy», en alusión a Rudolf Hess.
Nancy Garrido, llevada por la pasión de los testigos de Jehovah, ha podido estar fascinada por Phillip Garrido, que pretendía hablar con la voz de Dios.
Es tán culpable como él, no vengamos a defenderla a ella ahora por ser mujer. Esta mujer conducía el coche en el que se llevaron a la niña y jamás ha denunciado en 18 años sabiendo que la violaba su marido día sí y día también. Ahora que no venga llorando lágrimas de cocodrilo, que le ha jodido la vida a bastantes personas, sobretodo Jaycee. A la cárcel de por vida hasta su muerte por vejez para ella y su marido, culpables al 50%. Yo les haría otra cosa, pero me ahorro el comentario.