Hace 14 años | Por Ricewind a soitu.es
Publicado hace 14 años por Ricewind a soitu.es

El hospital infantil Indira Gandhi es el termómetro que mide la fiebre sanitaria de Kabul. Los casos más graves de malnutrición severa se concentran en varias de sus salas. 23 niños y niñas ofrecen 46 ojos intensos de tristeza y dolor al visitante, mientras 23 madres esconden sus rostros como si se avergonzasen de la pobreza endémica en que viven, que es la responsable de los horribles cuadros médicos con que sus pequeños llegan al hospital.

Comentarios

k

Se me cae la cara de verguenza viendo las fotos. Morirse de hambre es algo que debería ser impensable.

CIB3R

#1 Pues aunque resulte duro, así está el mundo montado y así de mal repartido está el dinero. Ese dinero que nos ha llevado a un punto de inflexión con está crisis, pero seguramente no hará recapacitar a nadie y seguirá habiendo hambre y pobreza en el mundo.

Lapices.

De vergüenza.....y la Comunidad Internacional gasta millones en un gobierno títere...