Hace 12 años | Por AbrmoralesM a blogs.uoc.edu
Publicado hace 12 años por AbrmoralesM a blogs.uoc.edu

Interesante post en el que la autora explica desde distintos puntos de vista (sociológico, ergonómico ...) por qué las gafas de Google están destinadas al fracaso

Comentarios

AbrmoralesM

Aquí en castellano:

Hoy hago un pequeño homenaje a un compañero de trabajo, quien tiene un blog al que cada día cuenta cosas que no le gustan. También es un pequeño homenaje a mis discusiones caseras: en casa somos un poco frikis quizá (no está mal reconocerlo), y conversaciones como "las Google Glass son el futuro" (dice él) seguido de un "pero qué dices? quién se va a Poner eso? qué quieres, matarte por la calle? y encimeras se que son Feases ... como no se pongan a fabricarlas en lentillas ... "(contesto yo) son de lo más habituales.

Así es que me apetece dar, de forma algo más plácida y seria, los argumentos por los que no creo en este proyecto. Por si alguien no sabe sobre qué estamos hablando, aquí os dejo el vídeo demo de promoción:




Muy impresionante, ¿verdad? Pues no creo. Y el primer motivo que encuentro para este escepticismo tiene que ver con algo tan sencillo como la distinción entre la visión central y la visión periférica. Ir con estas gafas por el mundo debe ser igual de peligroso o más que ir leyendo el móvil por la calle. O conduciendo. Digo yo que por algo los aparatos de gps que llevamos en el coche te van cantando la ruta que debes seguir. Y por mucho que esta tecnología nos permita en un futuro dibujar el mapa con la dirección que buscamos en el cristal del conductor, estoy segura de que no llegará a implementarse de esta forma. Por suerte!

Sí es cierto que la sensorización de objetos (no sólo unas gafas, sino cualquier elemento físico que se pueda encontrar en nuestra casa o en nuestra ciudad) dotándolos de conexión a internet es una posibilidad que existe hace tiempo y que, aunque así, no acaba de arraigar. En cambio, no hace falta que explique lo que ha arraigado y lo que nos ha gustado poner internet a nuestros teléfonos! (Tanto que ya casi ni los usamos para llamar). Y ahora voy a ser un poco atrevida, y voy a defender que los motivos de estas diferentes apropiaciones són tanto de carácter macrosociológico como microsociológico.

A nivel macrosocial, basta con ver la fascinación que producen las pantallas entre los niños más pequeños, sean las de televisión, las de teléfonos móviles o, mejor aún, las mágicas pantallas de las tabletas tipo iPad, y es que no está de más recordar que la televisión ocupó el lugar que tradicionalmente estaba destinado a la chimenea durante el siglo XX, y que la chimenea era un elemento tan central en el hogar que, no casualmente, incluso comparte el nombre. Si nos paramos a pensar ahora en nuestra sociedad postindustrial y de carácter marcadamente individualista, no será extraño pues darnos cuenta de que a todos nos gusta llevar nuestra pantalla personal en el bolsillo, convirtiéndose y haciendo una nueva recolocación respecto al lugar privilegiado donde lo público y privado confluyen.

Y a nivel microsociológico, creo que nos olvidamos a menudo de la importancia que tiene, más allá de la utilidad o las funcionalidades que pueda tener un objeto, el significado social que le otorgamos las personas, quiénes somos los que al fin y al cabo acabaremos apropiándose hacernos (o no) de una determinada tecnología. En este sentido, un ejemplo sencillo y bien sobrecogedora es lo que proveyó el profesor @ dlopezgom en su investigación sobre teleasistencia, en la que mostraba como la reticencia a llevar dispositivos de teleasistencia iba ligada precisamente al significado social negativo que se daba a los dispositivos ( unos collares con un botón para avisar al personal sanitario), ya que los relacionaban lógicamente con su enfermedad.

Así pues, termino el post con el vídeo de presentación del project Glass en la última key note de Google, en la que se mostraba en directo cómo se usaban las gafas como cámara de vídeo y como llevaban a cabo una retransmisión perfecta en streaming incluso llevándose las personas que se lanzaban en paracaídas. Y aprovecho y dejo aquí la petición que, a pesar de ser tan escéptica con las gafas, se implemente por favor esta tecnología a las ventanas de los aviones: siempre recordaré cuando, volviendo de un viaje a Pekín, estuve totalmente segura de que estaba viendo la muralla china desde el cielo ... y el caso es que ahora nadie me cree!

D

#0 De por qué no me 'gustan' a por qué no triunfarán hay una gran diferencia, eh.

AbrmoralesM

#2 en este caso explica por qué "no le gustan" y por qué "no triunfarán"

D

#3 Vaya, gracias. Seguiré este blog para predecir el número de la lotería ya que no sabía que las preferencias actuales se pudieran aplicar a las preferencias futuras. El sector tecnológico pensaba que era cambiante.

nekrodomus

Pues no se...pero creo que hay gente que está interesada en que el proyecto salga adelante... http://planetared.com/2012/07/la-industria-del-porno-interesada-en-las-google-glass/

D

Yo me voy a comprar 10.