Hace 10 años | Por Ratoncolorao a revistagq.com
Publicado hace 10 años por Ratoncolorao a revistagq.com

Los puestos de castañas nos recuerdan, de alguna manera, que moriremos. ¿Por qué esa sensación de seguridad y confort, entonces? ¿Por qué sentimos una lumbre en nuestro interior cuando empezamos a olerlas por la calle? Quizá la respuesta esté en nuestros recuerdos: éramos niños la primera vez que vimos un puesto de castañas. Y seguro que algún adulto nos explicó lo que significaban. Y seguro que ahora asociamos su visión a ese recuerdo, probablemente a los primeros días de clase o al inicio de la temporada navideña.

Comentarios

L

Pues a mi jamás me han recordado que algún día moriré.

D

#2 Ni a mi. Decirnos a nosotros que, porque el orígen de la castañada era la celebración de los muertos pagana, nos tiene que recordar nuestra mortalidad, es un poco como decirnos que porque nos banqueteamos en nochebuena es porque idolatramos a cristo; pues no, mire, yo ceno con la familia por tradición y ya está.

A parte de eso, el artículo está bien, eh?

L

Este año, la castañera en biquini.

joder, qué imagen!

D

Este tipo debe ser la alegría de las fiestas

Robus

A mi me recuerdan que, cuando era pequeño, en otoño hacia fresco...

Ahora, cuando veo una castañera asando castañas mientras la gente va en manga corta, me dan penica... cry

D

Estoy de acuerdo en lo puta que es la nostalgia (la morriña, que diríamos en mi tierra)

Aunque no tengo nada contra las castañas

D

En ocasiones veo muertos ... en las castañas.