La crisis actual reaviva el debate entre el keynesianismo, que defiende el intervencionismo estatal para salir de la crisis, y la Escuela Austriaca, que aboga por dejar que caigan las grandes empresas y bancos hasta que la economía reabsorva el shock. La solución keynesiana plantea una recuperación más lenta e incierta pero con menos coste social y político. La solución austriaca plantea una recuperación más rápida a costa de grandes caídas y un coste social elevado y más traumático. Este debate teórico sobrevivirá a la propia crisis.
Comentarios
En contraste, si miramos a las recesiones normales, donde el país no estaba en guerra, estaba bajo el patrón oro y donde la política keynesiana no era dominante, nos encontramos una historia muy diferente.
Patrón oro. Es es siglo XIX quiere sus economistas de vuelta.
> La solución austriaca plantea una recuperación más rápida
Claro, porque con un sistema financiero destruido, deflación y un paro del copón se reasignan los factores a toda hostia (¿apetece una Gran Depresión?). En fin, qué podemos esperar de LD.
#4 Lo curioso es que menciona precisamente tres depresiones que se producen durante el auge del keynesianismo (1945 - 1970). Aunque viendo cómo eran¹ las depresiones y los ciclos económicos con patrón oro antes de Keynes, se entiende que no tenía mucho donde escoger
¹ http://www.organissimo.org/forum/uploads/monthly_09_2007/post-353-1188669960.jpg
Absorber, absorba, reabsorber, reabsorba... no es como observar
La patrulla ortográfica está de guardia...
En respuesta a Kartoffel el artículo no es de LD, está traducido del Instituto Ludwig Von Mises.
El sistema financiero no está destruido. Deberían quebrar apenas un 5, 10 ó 20% de bancos para sanearlo. Que no quiebren supone que les paguemos su irresponsabilidad. Y las fábricas de coches igual. Que no quiebre una fábrica supone que todos les paguemos los sueldos a los trabajadores de la fábrica, mediante subsidios a esas compañías. Lo primero que hacen los directivos son repartirse sus bonus millonarios. Y luego extorsionar de nuevo a los gobiernos keynesianos. Y luego si hace falta finalmente quiebran, se van de rositas y llegan los gobiernos keynesianos a nacionalizar la industria para mantener unos puestos de empleo que de nuevo pagan todos los agentes de la economía.
Keynesianismo o la trampa del socialismo de los oligarcas, también llamado socialismo de salón.
El artículo plantea un debate que lleva abierto muchos años, que sigue vigente y que seguirá siendo relevante más allá de esta crisis. Sin embargo 3 personas lo tacharon de irrelevante y 1 de amarillista. Me parece que hay mucha gente que prefiere ver el mundo tras una venda. Cuestión de gustos.