"Dije que el manga era una moda y la gente también entendió lo que quiso entender. El manga no forma parte de la cultura nuestra occidental. O sea, leer los libros al revés no es normal. (...) Las modas llegan y después se quedan. Ahora, en los tiempos gloriosos de Glénat se editaba muchísimo más que ahora. Con tiradas muchísimo más grandes. Pero ahora lo que hay se ha quedado hasta consolidado, y va a durar mucho tiempo. Y encima el manga ha tenido una cosa muy positiva, muy buena, y es que trajo a las mujeres al mundo del cómic"
Comentarios
#5 El subidón de precio de las grapas de las colecciones de los X-Men tiene delito.
Por no decir que los tomos recopilatorios que sacan en EEUU los lanza con suerte a mis 4 o 5 años.
Es de Panini. ¿Qué va a decir? Ellos editan (de forma muy cuestionable, todo hay que decirlo) Marvel en España. Y Marvel está en horas muy bajas salvo el relanzamiento de los X-Men y alguna que otra colección.
#3 Realmente era, se jubila mañana. Esta entrevista es su despedida.
#4 Pues a ver si el nuevo editor se repiensa lo de los precios, porque yo ya he dejado de comprar algunas de las colecciones que terminaban ciclo, y cada día me da más pereza comprar nada, ahora que ha cerrado la tienda de referencia que tenía. Estoy por hacerme una cuenta del Marvel Unlimited(aunque igual se me haga algo incómodo leer en inglés), o igual desengancharme de una vez
encima con la mierda de distribución que hay, tengo colecciones con números que no han llegado, y esperando para poder continuarlas o no
Leer de derecha a izquierda es perfectamente normal para los japoneses. Lo que es de anormal es marcar como normal solo lo que tu conoces.
#1 No es normal en nuestra cultura, a eso se refiere. Una vez leemos manga y nos acostumbramos (que creo que es casi instantáneo, recuerdo que la primera vez que leí un manga le dí unas cuantas vueltas al tomo hasta que entendí cómo funcionaba, pero a los pocos minutos ya ni me daba cuenta) pasa a serlo. Pero puesto que una amplia mayoría de la población española no lee manga, sigue sin ser normal (en España, se entiende). Este hecho no implica desaprobación, desprecio ni nada por el estilo.