Hace 4 años | Por MarshallSamson a yorokobu.es
Publicado hace 4 años por MarshallSamson a yorokobu.es

"¿De qué recoveco ancestral emerge el temblor cuando padecemos nuestro turno en la sala de espera del dentista? ¿A qué velocidad debe latir nuestro corazón cuando, por fin, nos envalentonamos, nos acomodamos –tan incómodos– en esos sillones dentales decididamente ergonómicos y algo siderales? Las respuestas se antojan complejas pero existe una constatación real: casi todo el mundo sospecha del dentista, le teme".

Comentarios

yoma

A mi me da mas miedo cuando salgo que cuando entro. Es cuando tengo que pagar la factura.

D

Porque vimos Marathon Man.

wondering

No lo entiendo.

D

Porque te hace daño en la boca y la cartera.