Tras el revuelo de la patente de la pulsera de Amazon, la empresa desmintió que pretendieran “rastrear” a sus empleados y matizó que su dispositivo estaba pensado para facilitar la tarea de los trabajadores del almacén. Sale así al paso diciendo que se trata un simple escáner de muñeca.
Comentarios
Coño peor son los iponés o androidés, y la gente incluso paga por ellos.
Pronto serán todo robots y se acabará el problema.
Las actitudes cívicas y la moderación son la trampa de la ideología burguesa dentro del capitalismo.