Hace 11 años | Por Ripio a swissinfo.ch
Publicado hace 11 años por Ripio a swissinfo.ch

La algarabía de los niños durante el juego puede ser reconfortante para algunos, pero en Suiza el bullicio que producen los menores es una causa habitual de quejas. El asunto comienza a “hacer ruido” en el ámbito político. "Deseamos que los espacios públicos sean considerados como espacios educativos. Lo que ocurre en esos sitios es fundamental para el desarrollo integral de los niños y los jóvenes. Ahí es donde aprenden el funcionamiento de la sociedad, la manera de comportarse y de establecer límites".

Comentarios

Ripio

Quejarse por el ruido de los niños en un parque es demencial. Lo que me faltaba por oír.
Debería ser hasta obligatorio, lo anómalo es lo contrario.

D

#2 no

#3 los países europeos en general se quejan hasta su haces ruido al respirar en el autbus.

Tengo amigos que les regañaron por reirse en un banco en Praga.

Son sociedades demasiado cerradas en público.

D

#5 A mi en Alemania me han regañado por ir hablando en un volumen normal con mi mujer. Vale que en España somos muy ruidosos, pero en los países germanoparlantes son muy pesados y extremos con esto. Buena prueba de lo extremos que son, es esta noticia con denuncias en los parques infantiles por ruído y toques de queda de menores.

IndividuoDesconocido

¿Soy el único que ha leído Aborto infantil en el titular?

D

"Ola de demandas judiciales". Y es que los suizos son así. Nadie te vendrá a decir que "molestas". Directamente te encontrarás la citación al juzgado.

anor

Ante los ruidos procedentes de los espacios publicos hay soluciones faciles: alejar de los espacios publicos ruidosos. Y si se vive cerca de esos espacios, hay tambien soluciones como las ventanas antiruido.
El problema son los ruidos vecinales en el interior de la vivienda, ante estos no nos podemos defender porque cuando son muy elevados ( en mi casa escucho ruidos hasta de 90 decibelios durante horas, es decir como el claxon de un coche ) no hay ningun aislamiento acustico que nos proteja.

D

Voy a comprar el primer billete para Suiza. Estoy hasta las pelotas de niños, sus histéricas madres gritonas, perros y demás alimañas que tengo como vecinos.