Publicado hace 12 años por NicolaStillitani a nicolastillitani.com

Con interminables muestras de ceguera comercial las discográficas, editoriales, tradicionales intermediarios entre el autor y su público, se esfuerzan en limitar a sus potenciales clientes el acceso a los contenidos. Desde el episodio de la red Napster, hemos sido testigos de acciones legales en contra de plataformas digitales de descarga de contenidos.

Comentarios

p

una lastima q sea tu propia entrada la q pasas a meneame, eso siempre lo tratan de spam.

D

No entiendo a los defensores del pirateo. Un autor de una obra importante tiene derecho a ganar mucho dinero por su explotación. Proporcional a la demanda que haya por conocer su obra, leerla, verla o escucharla. Este mal uso de Internet ha devuelto a los autores a la triste situación que tenían en el XVI. Van a tener que encontrar mecenas acaudalados, porque lo que es vendiendo ejemplares...

N

El principal beneficiario del derecho de autor es para el intermediario, no para el autor. Internet a permitido que las obras valiosas reciban un público que merecen. No es perfecto, pero es más justo.