El primer grado es el simple, que ni le importa ni la entiende, y es feliz con la satisfacción de sus necesidades básicas. El segundo es el fatuo, que quiere ser excelente, aunque no entiende en qué puede eso consistir, por lo que sólo puede imitar, copiar o fingir. El verdaderamente peligroso es el mediocre inoperante activo, ser maligno incapaz de crear nada valioso, pero que detesta e intenta destruir a todo aquél que muestre algún rasgo de excelencia.
Comentarios
Joder, dejad a Zapatero en paz. Si, total, ya se va.
Es verdad, ZP sigue erre que erre. Y el barbas también.
#7 No, para nada. No veo en ningún lugar del link que hable del nivel de incompetencia.
El economista inglés N. Parkinson formuló así la ley que lleva su nombre: "En una organización, todo el mundo tiende a ascender hasta llegar a su nivel de incompetencia"
Yo siempre se la he atribudo a Laurence J. Peter. "El Principio de Peter"
#2 Me parece que se le han traspapelado las leyes
http://es.wikipedia.org/wiki/Ley_de_Parkinson
"La mediocridad es la incapacidad de apreciar, aspirar y admirar la excelencia."
Buff... como me recuerdo esto a mi empresa...
Da mal rollo que un psiquiatra utilice un lenguaje tan cargado de estúpidos prejuicios... vas a que te eche un cable porque atraviesas un mal momento, y el sujeto este, en lugar de ayudarte... según le cuentas tus problemas seguro que sólo se preocupa de etiquetarte para clasificarte en su estúpido catálogo como mediocre, inepto o vete tú a saber.
Muchos "mediocres" señor mío, no viven tan prendidos de la excelencia porque ocupan su tiempo en vivir la vida. Ya sabe... ordinarieces como cumplir con la responsabilidad de criar a los hijos, cuidar de sus padres y demás historias... también amar, soñar vivir sus circunstancias personales. Aunque a algunos elegidos les parezca una vida y unas circunstancias de mierda.
Lo curioso es leer los comentarios de la noticia. Todos dicen ver a mediocres por aquí y por allá. Debe ser que solo personas excelentes han leido el artículo.
Lo malo que tienen los jefes, es que deben tomar decisiones y claro, se les ve el plumero, pero no creo que haya más mediocres en la parte alta de una organización. Aquellos que no toman nunca decisiones, nunca se equivocan, pero no porque sean buenos.