He vuelto de pasar unos inmerecidos días de asueto en Mallorca. Y lo que he visto ha erizado el áureo y sedoso vello que desciende en catarata a lo largo de mi occipital. Pueden imaginarse que tipo de fauna de pelagallos , pelafustanes y pelaespigas hozábamos en la piscina. La mitad de ellos se bañaban con camiseta, pues durante los tres primeros días se torraban al sol desde el orto hasta la lipotimia. No salían del recinto en toda su estancia, sólo iban de la hamaca a la barra y de la barra a la hamaca, como un puto teleférico...
Comentarios
Me juego el karma con este envio, bastante friki (burbujil) pero como destacan en el blog, es una increible composicion de ideas y del lenguaje para un relato demasiado cercano, de humor?...
es ironia o el que escribe esto es un poco snob?
Cuando se usan culturismos hay que saber usarlos muy bien y con mucho cuidado; pero éste no es el caso: sobre todo el principio del relato se hace pesadísimo con tanta palabreja rebuscada, que ni caen graciosas ni le dan un toque distinto al relato: sólo lo hacen aburrido y difícil de leer.