Una pareja de lesbianas de Colorado (Stephanie Schmalz y su pareja Jeanine) acudió a la pastelería Masterpiece Cake Shop a encargar los dulces para la fiesta de su unión civil. La dependienta, les dijo que la política de la empresa, basada en sus creencias religiosas, les impide atender a las parejas del mismo sexo. Días después Stephanie Schmalz habló por teléfono directamente con el dueño de la empresa, Jack Phillips, y encargó dulces para veinte invitados a la celebración de la boda de dos perros, “Roscoe” y “Buffy”. No hubo problema...
Comentarios
Bueno, seguro que a perros homosexuales tampoco...
al final los perros no tienen la culpa de las actitudes retrogradas de los humanos.
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Dos pastelerías que se negaron a atender a parejas...
wweek.comY qué... ¿no pueden elegir? es su negocio. Hablamos de elecciones, unas eligen sobre su cuerpo y otros sobre a quien vender algo. Bastante vergüenza me daría a mi tener una tienda donde sirven a perros (solo eso ya me da grima) antes que a personas. ¿Cada establecimiento que haga esto va a venir aquí?... por qué no creo que sea el único que discrimine. En las discotecas discriminan a los tíos, ¿traemos los nombres de los locales?...
Es porque todos los perros se van al cielo, pero ningún homosexual lo hace (a menos que haya recibido las órdenes).
Pero... si tienes un negocio... no me jodas. Ambas cosas dan pasta!