Descendiendo por el camino, en el campo de hierba recién cortada, el olor es encantador. A su derecha se encuentra un pequeño arbusto de acacia, con dos criaturas mágicas que viven en ella. Tienen que pertenecer al reino mágico, pues visten como si así lo fueran, con plumas de madreperla sobre un abrigo de brillante cuero negro.
Comentarios
Sí, es muy cursi. Pero las fotos son sencillamente espectaculares.
...o por decirlo de otra manera, un desnudo entomológico.
Joder, que grima da el insecto, pero las fotos son geniales!!!