Hace 13 años | Por Tomaydaca a avui.cat
Publicado hace 13 años por Tomaydaca a avui.cat

Hay motivos para preocuparse ante los pronunciamientos recientes del TS, respecto del modelo lingüístico escolar catalán. Las sentencias introducen una serie de consideraciones que pueden contribuir a desfigurar notablemente el Estatuto de Autonomía. La primera considera también el castellano lengua vehicular junto con el catalán. La segunda consideración de la doctrina del TS que afecta sensiblemente el modelo catalán, consiste en la desautorización del sistema de atención individualizada para atender a los alumnos que opten por el castellano.

Comentarios

Tomaydaca

Traducción al castellano de los párrafos de la noticia:

El Tribunal Constitucional no ha fijado la cantidad de enseñanza en castellano-no es ésta la función de los tribunales-, pero ha construido algunos criterios. En 1994 ya indicó que la enseñanza en castellano debía ser como mínimo el necesario para garantizar su conocimiento, y apuntaba que debía tener alguna presencia en los niveles posteriores al "primera enseñanza". En la sentencia de 2010, el tribunal ha sido más explícito y afirmó que la enseñanza en catalán y en castellano debe generalizarse en el conjunto del proceso educativo. Es en este contexto que se ha pronunciado el Tribunal Supremo, el cual reconoce el derecho del recurrente que el castellano también se utilice como lengua vehicular-por cierto, en la declaración del tribunal no se dice que deba ser en todos los cursos, lo que pedía la parte actora-, y, por otra parte, afirma que mientras haya déficit en la normalización del catalán, hay que otorgarle un tratamiento diferenciado respecto del castellano en una proporción razonable, proporción que, por contra, deberá ser idéntica cuando se alcance el objetivo de la normalización. Esta afirmación de paridad del órgano jurisdiccional excedería su competencia. Nada que decir que el castellano también tenga que ser lengua vehicular y que aquellos órganos lo recuerden y lo manden. Pero la extensión de la enseñanza en castellano es una decisión en buena parte política. Jurídicamente, esta extensión está condicionada por la exigencia, que deriva de la Constitución, que los alumnos conozcan adecuadamente el castellano y el catalán cuando acaben la enseñanza obligatoria (lo que alcanza satisfactoriamente el modelo catalán), y debido a que la facultad de limitar la libertad individual requiere que la restricción sea proporcionada y justificada.

El modelo lingüístico escolar catalán se encuentra hoy establecido en la ley de educación de 2009, regulación que, como es sabido, fue impugnada ante el Tribunal Constitucional. La sentencia que se dicte será decisiva. El intérprete supremo de la Constitución haría bien en tomar nota de los efectos favorables del modelo catalán, lo que avalan estudios e informes. Que los tribunales tengan en cuenta los efectos es una circunstancia capital, y encontramos un buen ejemplo, precisamente relacionado con la lengua vehicular, en la sentencia Lau v. Nichols, que el Tribunal Supremo estadounidense emitió en 1974. El tribunal, además, saber decidir con una fuerte contención. Y es que un activismo excesivo de los tribunales en este campo, puede resultar injustificado y contraproducente. De momento valdría
la pena que el Departamento de Enseñanza, frente a las sentencias del Tribunal Supremo, aprovechara la ocasión para perfeccionar el modelo.

sorrillo

Las fuerzas políticas de Catalunya en su amplia mayoría apoyan el modelo educativo actual, por ser el mas adecuado para la situación lingüística en Catalunya.

No me cabe ninguna duda que harán lo que sea necesario para mantener el espíritu del modelo cumpliendo con la legislación vigente proveniente del estado y modificando la legislación catalana en lo que sea necesario acorde con su plena competencia en educación.

D

No hay motivos para preocuparse, porque los que quieren desterrar el castellano de la vida pública y de sus instituciones han sido puestos en su sitio y ahora van a dedicarse a lloriquear. Cuando en Bruselas les vuelvan a dar cera, porque los apestosos hispanohablantes seguiran teniendo derecho a recibir la educación pública en el idioma que deseen, pedirán el ingreso en el áfrica subsahariana, donde no discriminan la lengua catalana.

Irrelevantérrimo.

Robus

#1 Festival del humooooor (espero)

D

#2, soy un provocador, lo sé, pero como los de la barretina se pican... lol