El número de personas consideradas ultrarricas, con fortunas superiores a 30 millones de dólares (unos 27,6 millones de euros), se situó en España en un total de 10.149 en 2023, el 1,7 % más que un año antes, con la previsión de que lleguen a 11.914 en 2028, según la consultora inmobiliaria Knight Frank. De acuerdo con su último informe sobre riqueza global, a cierre de 2023 en el mundo había 626.619 ultrarricos, un 4,2 % más que en 2022, aunque con la previsión de que esa cifra crezca un 28 % en 2028.
Comentarios
No seáis ansias, la "trickle-down economics" (neoliberalismo) necesita un poco más de tiempo para que surja efecto
#1 Efectivamente, tendrá efecto... mañana...
[Modo barrio sésamo ON]
A ver, para los tontos que todavía no se han enterado....
¿ Qué tiene que haber para que exista un solo rico ? -> ¡¡¡¡ Muchos pobres !!!!
[Modo barrio sésamo OFF]
Pues todavía tenemos que ver a mucho trabajador votando a los mismos partidos que votan los millonarios, los fondos de especulación y la gran banca... y tan panchos...
El gran cáncer de la economía es la acumulación excesiva de riqueza (poder) en pocas manos.
Recordar que si tu tienes 10 ferraris, y yo ninguno. Estadísticamente ambos tenemos 5 ferrarís.
Recordar estas cifras cuando la digan que la economía va bien. Va bien para los ricos.
aun falta el típico comentario para consolarnos de que la pobreza en el mundo se ha reducido
o sea, que estos son los que se llevan la cacareada recuperación
Yo estoy debajo de la mesa.
Tenemos a estos, los de la clase alta y luego la clase media, ya sabéis, el resto de gente que vive de una nómina. Es lo que se dice ahora, para que no parezcan tan pobres.
No sé, no debe parecerles a los proletarios que la precariedad, la pobreza y el subdesarrollo en que sus propios padres les han hecho nacer sean circunstancias tan horribles, si arden en deseos y defienden como un derecho el poder hacer nacer también a sus propias proles en ellas, a que sus proles también reciban en herencia y les agradezcan, en forma de pensiones, esa pobreza, esa precariedad, ese subdesarrollo y ese capitalismo tanto como ellos, los proletarios, los agradecen a sus padres, en la misma forma de pensiones.
Desde esta perspectiva, tener hijos es la manera más clara y evidente (más incluso que meter una papeleta en una urna) en que una persona puede mostrar su aprobación favorable del entorno económico o de las condiciones económicas en que dicha persona hace nacer a esos hijos. Pues ¿qué persona ética e inteligente haría nacer a sus propios hijos en un determinado entorno o circunstancia económica si considerase que ese entorno o circunstancia económica es horrible? Las proles, pues, son las papeletas electorales más rotundas, y por tanto las que más ambiciona el capitalismo, capitalismo que no existe gracias a los capitalistas, sino gracias a los proletarios.
El que es pobre es porque quiere votar capitalismo y pobreza, con sus votos y con su prole.
Si los proletarios quieren arreglar la economía con más niños y con más proletarios en vez de con menos capitalismo, están en su derecho, en su costumbre y en su cultura, y se los tenemos que respetar.
Y es que el libro de los gustos está en blanco, y la convivencia en una sociedad civilizada debe consistir en que sepamos respetarnos los unos a los otros las costumbres, culturas, derechos, preferencias económicas, criterios progenitores y principios éticos de cada cual, aunque puedan ser muy diferentes a los nuestros.
Así que no permitáis, proletarios vasallos españoles, que estas noticias aporófobas desvíen vuestra atención y vuestra ética: no renunciéis a pegaros el gustazo de generar otro baby boom para hacer nacer a vuestras proles en la pobreza o la precariedad, y entregarlas al capitalismo y a la monarquía. Porque la natalidad y las pensiones lo necesitan, y porque aunque en un primer momento quizá podría pareceros mal hacer nacer a vuestras propias proles en la pobreza o en la precariedad, cuando vuestras proles alcancen la mayoría de edad también se volverán defensoras del derecho de hacer nacer a sus propias proles en la pobreza, en la precariedad, en el capitalismo y en la monarquía, a que estos hijos suyos (vuestros nietos) les agradezcan todas estas cosas, en forma de pensiones, tanto como vuestras proles os las agradecerán a vosotros, en forma de pensiones, y tanto como vosotros las agradecéis a vuestros padres, en la misma forma. Así que no hay ningún problema con que hagáis nacer a vuestras proles en la pobreza, en la precariedad, en el subdesarrollo, en el capitalismo y en la monarquía, porque vuestras proles os lo agradecerán, en forma de pensiones.
La cultura es la verdadera riqueza, así que dejad en herencia a vuestras proles la rica cultura de la pobreza.
No creáis, pues, a nadie que os diga que hay una guerra económica intergeneracional, o que hay una guerra económica o lucha de clases intrageneracional.
Y recordad que cuando hacéis nacer a vuestras propias proles en la pobreza y la precariedad, no serán los ricos, el capitalismo y la monarquía los que se estén riendo de vosotros, sino que seréis vosotros los que os estaréis riendo de ellos.
Y no dejéis de ponerle medallas a Leonor. Recordad que cuantas más medallas les pongáis a los Borbones, mejor os irá el Reino de España a vosotros, es decir, a ellos, a los Borbones.