Publicado hace 1 año por Diem_25 a covertactionmagazine.com

Yo sople el silbato y me encontré con una experiencia tan destructiva que no tenía palabras para describir lo que me pasó. Me propuse averiguar si lo que me pasó es un fenómeno conocido y, de ser así, si hay lenguaje y conceptos para explicar la experiencia. Encontré que está bien estudiado. Este artículo se centra en experiencias como la mía, en la que un denunciante que todavía está empleado hace públicas las revelaciones de problemas sistémicos debido a la inacción o el encubrimiento por parte de la institución.

Comentarios

Findeton

#2 Fácil, sin censura política/estatal. Nada de "seguridad nacional" ni pamplinas.

JohnnyQuest

#4 Qué fácil vivir con una concepción tan simplona del mundo. Ser servil nunca exigió grandes seseras. Como si ricos y poderosos existieran por el estado en vez de al contrario...

Findeton

#6 Bien que diferencies entre ricos y poderosos. Los poderosos=políticos=estado te obligan a trabajar para ellos (impuestos), los ricos no.

JohnnyQuest

#7 Qué simplón... por eso el político termina en una silla de un consejo de administración verdad? Porque es él el que tiene el poder. Qué pena de propaganda y adolescentes que se creen revolucionarios...

m

#7 rico = poderoso

Sólo se diferencian en el ámbito en el que aplican su poder.

Findeton

#10 No, poderoso es que tiene poder político, es decir que te puede obligar a lo que quiera casi (estado = monopolio de la violencia). Un rico no puede obligarte, ni a comprar sus productos ni tan siquiera a trabajar por él. Podría ofrecerte un millón al mes y tú decir que no.

m

#12 claro claro... El mundo de la libertad le llamáis algunos.

Findeton

#13 Gran argumento el tuyo.

m

#14 bueno, mejor el tuyo, donde va a parar.

Findeton

#15 Al menos razono en vez de lo que tú haces.

m

#16 claro, "poderoso es el que tiene poder político". Eso es un argumento de cojones. Porque no existe el poder económico, militar, religioso. No, sólo existe el poder político que es el que te molesta a ti..

Findeton

#19 El poder religioso no me molesta mientras no sea también poder político. Si los creyentes hacen caso al Papa, es porque quieren, no porque nadie les obligue.

Falk

#20 tb puedes hacer caso al estado o no. Eres libre en ese sentido.

El dinero es poder. Una persona con dinero no puede obligarte a trabajar para él como comentas salvo q contrate a unos sicarios para hundirte la vida o se dedique a extorsionarte de alguna manera hasta conseguir lo que quiere.

Findeton

#21 El dinero no es poder, sino que algunos intercambian dinero por poder y viceversa. De hecho de ahí mucha parte de la corrupción: los políticos tienen poder y quieren dinero y al revés los empresarios, así que llegan a un trato/intercambio. Y si hay amenazas/coacción (por ej por parte del Estado), te están coaccionando tu libertad por definición.

m

#20 eso lo único que me transmite es que odias al estado porque tiene lo que tú no tienes, poder político.

Glidingdemon

#12 claro así es, pero es que no le hace falta hacer eso, le sale carísimo, para eso ya tiene comprados a los políticos, para no tener que mancharse las manos, hay que hacerte un croquis para tener que explicartelo? El jefe de la mafia no se Mancha las manos, ni va vendiendo papeletas de rifas para eso ya tiene lacayos y voceros, lo entiendes ya?

Findeton

#23 Si el estado no tiene poder ni presupuesto, los políticos no tienen nada con qué ser comprados.

Glidingdemon

#24 si no lo entiendes, lo siento, he sido suficientemente claro.

Malinke

#12 los ricos pagan campañas políticas, los ricos tienen empresas y bancos, tienen acciones en empresas y bancos y están en consejos de empresas y bancos, tienen medios de comunicación o les pagan para que hablen a favor de sus intereses y con controlar a la política controlan justicia, leyes y el monopolio de la violencia.

D

#7 Alguien leyó a Ayn Rand de adolescente y se quedó flipado y atrapado... roll Y no quiero señalar a nadie...

parrita710

#17 Literalmente me ha "argumentado" que si los dentistas no necesitan licencia serían mas baratos.

D

#27 lol

Autarca

#2 #4 Y luego nos soltaran el rollo de que vivimos en "democracia representativa"

Si ni siquiera podemos saber lo que verdaderamente hacen, no podemos elegir con libertad.

KevinCarter

Esto ocurre desde hace siglos, debido, precisamente, a miles de mierdas y basura que viven de mantener las trampas de otros y a quienes no les importa la sociedad mientras les sigan echando migajas de pan. Es un clásico dentro de las formaciones de sociedades.

D

#3 En un mes hay elecciones. Vayamos a votar que con eso se arregla. Y si puede ser a los mismos mejor.
Mejor aupar a Uno de los míos, que lo disfrute.

JohnnyQuest

#5 Si, sigamos votando a las corporaciones que controlan a los partidos políticos principales a través de sus deudas, o de los conglomerados de comunicación de masss que conforman las opiniones. Vota dinero, vota diferente...

MoñecoTeDrapo

Veo una defensa de las "Karens'

Niltsiar

Se puede menear mil veces? Articulazo. Lástima que esté centrado en los usanos...

D

Me gustaría aprovechar este artículo para incidir en un aspecto que no se trata a menudo: las reglas verbales. Soy una aficionado al tema, así que perdonen la simplificación (también aprovecho para ordenar mis conocimientos sobre el tema).
 
La conducta mediada por reglas verbales es aquella en que no se está expuesto a las contingencias, pero estas se "explicitan" mediante conducta verbal, ergo, oraciones (si son observables por un solo observador, pensamientos). Un ejemplo clásico es el siguiente: "Siempre serás alcohólico". Está frase es una regla verbal fuerte que pretende servir de guía independientemente de las contingencias o situaciones a las que estemos expuestos. Es ese evidente que no se es alcohólico, que alcohólico significa beber en demasía compulsivamente. Por lo tanto, las causas del beber no son el alcoholismo, sino estaríamos ante tautologías o definiciones circulares. 
 
El imperativo categórico o la dicotomía de control estoica, no son más que reglas, con el fin de dirigir la conducta de un modo concreto independientemente de la situación a la que estemos expuestos. Relacionándolo con el artículo, ejercer una conducta cómo la de denunciar abusos de poder, puede responder a una regla verbal, así es como funciona, a grosso modo, la moral, o lo comúnmente llamamos "fidelidad a unos principios". Un individuo que presencia uno de estos abusos pero no dispone de reglas verbales "fuertes", probablemente actuará según las contingencias vigentes (tensión, perdida del empleo, marginalización por parte de los demás, miedo...); pero aquel que tenga reglas fuertes establecidas se verá impelido (determinado) a "seguir" esas reglas, puesto que el no cumplirlas será aversivo (culpa, vergüenza, pensamientos negativos sobre si mismo...), y el cumplirlas será reforzante, no por ser un santo ni un hombre "bueno", sino por mera causalidad. No hace falta decir de donde parten estas reglas, puesto que la conducta verbal encubierta es posterior a la conducta verbal a secas.
 
Para terminar, creo que el establecimiento de reglas "morales" es menester si queremos contribuir a una mejora de la sociedad. Desde reglas tan simples cómo no reaccionar desde las vísceras, leer los argumentos del otro a pesar de que sienta un rechazo de primeras, tratar al otro como se merece a pesar de estar yo cansado o cabreado, a otras como no perseguir un beneficio propio ignorando las consecuencias que ese acto tendrá en el establecimiento de ciertas prácticas o condiciones sociales (aquí caben muchas justificaciones que se dan hoy día partiendo de ese individuo atomizado que agradezco a muchos de por aquí por hacérmelo ver con argumentos y paciencia ). 
 
Además, si cómo sociedad tales conductas no se refuerzan, estas tenderán a extinguirse. Y si las castigamos, y no me refiero sólo a lo penal o a las amenazas, sino a considerarlas inútiles en ese modelo cálculo-beneficio del "homo economicus",  ya ni te digo. Invisibilizarlas, o darles un toque personal subjetivista cómo dice el artículo, es imposibilitar el refuerzo de esa conducta mediada por reglas por parte de otros al no haber estímulo discriminativo que "dispare" la conducta de reconocimiento o halago.