Las autoridades islandesas han anunciado planes para matar a más de 2.000 ballenas en un período de cinco años, en una medida que ha enfurecido a los grupos ecologistas. A pesar de la disminución del mercado mundial de carne de ballena y de la disminución del apoyo público, el gobierno optó por seguir desafiando la prohibición internacional de la caza de ballenas. Se autorizará a los balleneros a arponear 209 rorcuales comunes y 217 rorcuales aliblancos en aguas islandesas cada año hasta 2023.
Comentarios
Ya sabéis, lo de los países serios y eso.
Eso será si quedan
¿A nadie más le apetecería ver lo que le hace un torpedo a un ballenero de estos?.
#4 se podrían meter el arpón por el orto
Pues son pocos y mal abastecidos, debería ser fácil conseguir que entren en razón...