Hace 2 años | Por Peka a blogs.publico.es
Publicado hace 2 años por Peka a blogs.publico.es

Las declaraciones del ministro de consumo Alberto Garzón al diario británico The Guardian sobre la ganadería intensiva en España han elevado el volumen de una polémica que llevamos años arrastrando: la del impacto social, económico y ambiental de las macrogranjas. El lobby cárnico ha arremetido con enorme dureza contra Garzón, pero lo cierto es que los datos le dan contundentemente la razón al ministro.

Comentarios

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El antiguo dicho de que no hay más ciego que el que no quiere ver se queda desactualizado para estos tiempos. Los hay, hay ciegos que no quieren ver que además se hacen los sordos y que meten la cabeza bajo la tierra como el avestruz, creyendo para si mismos que de esa forma el problema no existe.

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Hay que tener en cuenta también el sufrimiento de los animales.

Jaime131
Jiboxemo

El término "bulo" debería de estar fuera del libro de estilo de cualquier periodista serio. Y de los diputados ecologetas también.

j

Y se nos olvida que el lobby del juego también tiene buenos motivos para ello. Es sabido que los enemigos de mis amigos, son mis enemigos.