En un escrito dirigido al secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez López, la Plataforma Patriótica Millán Astray recuerda que Pilar y María Millán Astray fueron «encerradas, juzgadas y condenadas solo por el hecho de ser hermanas del fundador de La Legión Española».
#10:
#1 Es parte de la estrategia de la derecha, igualar a los golpistas con los demócratas. En Chile ponen a las víctimas de la guerrilla antifascista en la misma balanza que a las de la violencia del Estado contra el pueblo. Aquí pretenden hacer lo mismo. Aquello de que hubo injusticias por ambas partes. Si las hubo no por eso la lucha contra el fascismo, contra los golpistas es menos justa.
#1:
Vomitivo el enfoque que da a la noticia La Razón (aunque lo esperado en esa bazofia de panfleto).
#1 Es parte de la estrategia de la derecha, igualar a los golpistas con los demócratas. En Chile ponen a las víctimas de la guerrilla antifascista en la misma balanza que a las de la violencia del Estado contra el pueblo. Aquí pretenden hacer lo mismo. Aquello de que hubo injusticias por ambas partes. Si las hubo no por eso la lucha contra el fascismo, contra los golpistas es menos justa.
“Cuando enviudó sacó adelante a sus tres hijos trabajando durante la Primera Guerra Mundial para el espionaje alemán en Barcelona, según reveló el historiador Fernando García Sanz en su libro España en la Gran Guerra, publicado en 2014. El personaje más importante al que espió fue al embajador británico en España Arthur Henry Hardinge, recibiendo la importante suma de mil pesetas por cada copia de documentos que entregaba.
De ideas conservadoras, apoyó a los militares que se sublevaron en julio de 1936, entre ellos su hermano José Millán-Astray, siendo encarcelada en la prisión para damas de España que el gobierno republicano organizó en el municipio valenciano de Alaquas. En esa prisión también fueron recluidas Rosario Queipo de Llano, Carmen Primo de Rivera o Pilar Jaraiz Franco, asimismo emparentadas con los generales sublevados más destacados. Terminada la Guerra Civil Española, recogió su experiencia en prisión en el libro Cautivas. 32 meses en las prisiones rojas (1940).“
Comentarios
Vomitivo el enfoque que da a la noticia La Razón (aunque lo esperado en esa bazofia de panfleto).
#1 Es parte de la estrategia de la derecha, igualar a los golpistas con los demócratas. En Chile ponen a las víctimas de la guerrilla antifascista en la misma balanza que a las de la violencia del Estado contra el pueblo. Aquí pretenden hacer lo mismo. Aquello de que hubo injusticias por ambas partes. Si las hubo no por eso la lucha contra el fascismo, contra los golpistas es menos justa.
#1 Da igual. Eso no le va a dar la razón a la razón.
Para mear y no echar gota... Dios, qué pais!!!!!
#2 gracias a dios
La verdad es que hay que tener jeta ,pero vaya, que se lo reconozcan y que la familia publique cómo vivió hasta que murió en 1949.
No es el mundo al revés. Es la democracia al revés.
Esto es apología del terrorismo, y es un delito condenado en España.
No me queda claro si el apellido procede de ashtray o de ass try.
Víctima el del alegato de;
mueran los intelectuales!" y "¡Viva la muerte!".
Un militar, y golpista no puede ser considerado víctima.
Meneo involuntario por dedazos.
Aunque probablemente sea así, es lo que tiene una guerra civil.
Me parece muy mal que encierren a alguien por su hermano. Claro que sí lo hizo la República, estará muy bien.
#6 https://es.m.wikipedia.org/wiki/Pilar_Millán_Astray
“Cuando enviudó sacó adelante a sus tres hijos trabajando durante la Primera Guerra Mundial para el espionaje alemán en Barcelona, según reveló el historiador Fernando García Sanz en su libro España en la Gran Guerra, publicado en 2014. El personaje más importante al que espió fue al embajador británico en España Arthur Henry Hardinge, recibiendo la importante suma de mil pesetas por cada copia de documentos que entregaba.
De ideas conservadoras, apoyó a los militares que se sublevaron en julio de 1936, entre ellos su hermano José Millán-Astray, siendo encarcelada en la prisión para damas de España que el gobierno republicano organizó en el municipio valenciano de Alaquas. En esa prisión también fueron recluidas Rosario Queipo de Llano, Carmen Primo de Rivera o Pilar Jaraiz Franco, asimismo emparentadas con los generales sublevados más destacados. Terminada la Guerra Civil Española, recogió su experiencia en prisión en el libro Cautivas. 32 meses en las prisiones rojas (1940).“