Cada vez se ven más 'riders' en las 'colas del hambre' que se forman frente a la Hermandad del Refugio para recibir un plato de comida y entregar los pedidos sin dolor de tripa
Trabajos precarios que lo son cada día más. Siguen cobrando lo mismo que cobrábamos los que lo hacíamos hace 20 ó 30 años, pero les toca pagar el coste de vida de ahora...y todavía buscan exprimirlos más.
Nosotros teníamos la okupación cuándo las cosas se ponían feas, y mil cosas que hacer sin dinero, ahora, cada vez más, se paga por todo. Poco quemamos para como nos tratan, y nos tratamos, porque lo de pedir comida en medio del calor de Madrid estos días o de la lluvia en enero en Santander, es de ser un cabrón redomado.
No sé. A mí lo que me parece es que al implicarse que la pobreza y la precariedad son cosas malas, se está estigmatizando y dejando en mal lugar a todos esos riders y a todas esas personas en general que, ejerciendo sus derechos legítimos, consideran que la pobreza y la precariedad son circunstancias estupendas, tan estupendas como para incluso desear hacer nacer a sus propias proles en ellas.
Debemos saber respetar todos los puntos de vista ajenos si queremos ser civilizados.
Comentarios
Es curioso, trabajo en un banco y no soy rico.
#3 Falsa analogía... "Trabajo en un banco y no tengo dinero."
#3 #4
Y el ginecólogo que no se comía un rosco...
#4 gracias
Trabajos precarios que lo son cada día más. Siguen cobrando lo mismo que cobrábamos los que lo hacíamos hace 20 ó 30 años, pero les toca pagar el coste de vida de ahora...y todavía buscan exprimirlos más.
Nosotros teníamos la okupación cuándo las cosas se ponían feas, y mil cosas que hacer sin dinero, ahora, cada vez más, se paga por todo. Poco quemamos para como nos tratan, y nos tratamos, porque lo de pedir comida en medio del calor de Madrid estos días o de la lluvia en enero en Santander, es de ser un cabrón redomado.
¿Antes de la ley Rider como estaban?
#1 Pues parece que ni mejor ni peor, es decir que no ha avanzado mucho la cosa.
#1 Eran todos emprendedores sin miedo al éxito
Pero no íbamos como un cohete?
No sé. A mí lo que me parece es que al implicarse que la pobreza y la precariedad son cosas malas, se está estigmatizando y dejando en mal lugar a todos esos riders y a todas esas personas en general que, ejerciendo sus derechos legítimos, consideran que la pobreza y la precariedad son circunstancias estupendas, tan estupendas como para incluso desear hacer nacer a sus propias proles en ellas.
Debemos saber respetar todos los puntos de vista ajenos si queremos ser civilizados.