Hace 2 años | Por nereira a republica.com
Publicado hace 2 años por nereira a republica.com

Los partidos de la izquierda radical de Portugal le negaron al gobierno socialista de Antonio Costa el apoyo a los Presupuestos de 2022 y el primer ministro portugués adelantó las elecciones. Las que ahora acaba de ganar por mayoría absoluta, mientras la izquierda populista y radical, que integran al Partido Comunista y al Bloque de la Izquierda, se vieron reducidos a la mitad.Y es, en este espejo lusitano, en el que se mira Pedro Sánchez y por el que no se descarta (en el PSOE lo están pensando) un sorpresivo adelanto electoral

Comentarios

Heni

#1 No creas, desde noviembre-diciembre recupero bastante terreno al PP, el por qué exacto no lo sé (y no, no me refiero a datos del CIS lol)
https://elelectoral.com/encuesta-media

https://electocracia.com/

kiio1

Sobre todo usando la Reforma Laboral ajjajaja

Dene

#7 yo todavía tengo fe en la humanidad .. y espero que los votantes se den cuenta que si algo " de izquierdas" ha hecho este gobierno ha sido porque UP estaba dentro.. y que voten en consecuencia.
reconozco que soy un inocente, pero sigo teniendo fe.

lonnegan

#9 Pues vete preparando, tener fe en la gente es lo mas absurdo que puede haber.

D

En serio el PSOE piensa que va a conseguir mejores resultados que en 2019? Después de una pandemia y mucha gente molesta por algunas de sus mentiras? Vamos que PP no se libra de eso. Otro que se va a pegar un batacazo.

g

#3 Pues igual baja podemos y recoge parte de esos votos, a saber

tiopio

Eso es lo que quiere la pepesunia. La legislatura debe acabar.

itfish

Podríame. podríamepodríame

derethor

los autónomos y sus familias le van a votar masivamente

E

#5 esos ya masivamente no le votaban (alguno quedaría) pero ese caladero queda a la derecha del psoe

Chumberable

Ya lo hizo antes de esta legislatura y casi se mete la hostia padre.

D

Lo que hará será provocar que los del gobierno Frankestein dejen de apoyarle, como esta haciendo con no tocar la reforma laboral ahora, hacerse la víctima y esperar que los españoles se lo crean, que hay suficientes gilipollas que podrían hacerlo.