Hace 8 años | Por gomadós a huffingtonpost.es
Publicado hace 8 años por gomadós a huffingtonpost.es

Hace un año, el mundo conoció a Louise gracias a un mensaje que comenzaba así: "Esta es mi hija. Louise. Tiene cuatro meses, dos brazos, dos piernas, dos buenas mejillas y un cromosoma de más". Caroline, mi mujer, escribió estas palabras porque no podía soportar que a nuestra hija la definiera su trisomía 21. No soportaba que apenas cuatro meses después de su nacimiento ya tuviera un destino asignado. ¡Un destino marcado por la menor ambición posible!

Comentarios

D

Cuando tienes una hija con síndrome de down eres inclusivo.

Cuando se está gestando rezas por qué no te toque ser inclusivo.

Yo estoy rezando porque mi sobrino, en unos días, no me haga ser inclusivo.

Tendrá dos brazos, piernas y demás, pero luego serán problemas de aprendizaje, conducta, problemas físicos varios, operaciones de piernas y corazón según el caso, y una persona que vas a tener que supervisar hasta tu muerte.

Me alegro que sean tan inclusivos, pero sigue siendo una pitada y una enfermedad que no deseo a nadie.

Homertron3

#4 buen comentario, pero un inciso: no es una enfermedad.

aunotrovago

El artículo da a entender que antes de nacer su hija la discapacidad estaba a años luz, eran extraterrestres fuera de su vida perfecta e hipervitaminada.

IvanDrago

Tener un hijo te hace soñar con un mundo menos hijo de puta del que has vivido... pero a nuestros padres les pasó lo mismo... y aquí seguimos...

D

#2 Cuando yo era pequeña a los "mongólicos" los tenían encerrados en casa, se avergonzaban de ellos. Ahora van al colegio, trabajan, han descubierto que pueden mejorar con té verde. El cambio creo que ha sido espectacular.

ipanies

El mundo no se como ira, pero España elige a representantes que han tratado a los discapacitados y enfermos como si fueran mierda, así que, no es por desanimar, pero esta sociedad no mira mucho por los discapacitados

Azucena1980

...y menos heteropatriarcal.

Añadió