Desde que la democracia se instauró en España, ningún gobierno ha querido acometer una reforma en profundidad de la administración de Justicia, pilar básico de cualquier Estado de Derecho. En los últimos años, la falta de inversión ha sido alarmante y ha generado lentitud en la tramitación de los casos (los sumarios se eternizan en los juzgados), excesiva politización de los órganos de Gobierno y un corporativismo insoportable entre ciertas élites que se reparten el pastel del Poder Judicial.
Comentarios
Y luego nos estrañamos..Qué sentencias más raras tú, ni que las hubieran hecho los herederos del franquismo...
Si sólo fueran las de justicia.... Que el autor de este artículo se dé una vuelta por la administración y tendrá tema para varias entregas.
Si la justicia funcionara con rapidez y eficacia, y tuviera fondos suficientes, no prescribirían tantos casos de delitos de cuello blanco.
SORPRESAAA!!!!
Si se quiere que "la cosa salga bien" y "entren los que tienen que entrar", hay que reconocer que no hay otra manera.
Nos asustamos?, esto es Españistan nada nuevo cara al sol...
!Pues claro! Hay que asegurarse una mayoría como "dios manda",o sea,conservadora de extremo centro.