Hace 8 años | Por nscocoalab a gciencia.com
Publicado hace 8 años por nscocoalab a gciencia.com

Los niños fueron infectados en 1803 para transportar "en Vivo" el remedio en barco. 3 Murieron en la travesía.

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arturios

Viruela, es viruela no varicela.

Pezzonovante

Es una noticia de 1803, por eso votan antigua ... vaya lumbreras

rogerius

#0 Noticia publicada en 16/04/2014

Pero es cultura…

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En 1796, Edward Jenner descubría los principios de la primera vacuna. Este médico británico observó que la infección con una variedad de la varicela que padecían las vacas inmunizaba a los humanos. Empezaba la lucha contra "El más terrible de todos los ministros de la muerte"según escribió el historiador británico Thomas Macaulay. Una contienda que concluyó en 1980, cuando la OMS dio por erradicada la enfermedad en todo el planeta.

La vacuna de la varicela pronto llego a Europa, pero el problema consistía en llevarla más lejos, en una época de transportes lentos y ausencia de sistemas de refrigeración.

Aquí aparece un médico alicantino, Francisco Xavier Balmis, quien log'ro convencer al rey Carlos IV para financiar una idea revolucionaria, infectar a niños huérfanos y utilizarlos para llevar la vacuna a América, donde la enfermedad llevada en 1518 por los primeros colones españoles tenía efectos devastadores.

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La llamada Real expedición Filantrópica de la Vacuna partió de la Coruña el 30 de Noviembre de 1803 y está considerada un hito en la salud pública, y que sigue despertando dudas éticas 22 niños huérfanos corteses se convirtieron así en héroes, llevando en sus cuerpos a America la salvación para miles de congéneres.

Una enfermedad que se cebaba con los niños.

Carlos IV fue muy sensible a la expedición su hija la infanta Maria Luisa, padeció la varicela, una enfermedad que se cebaba en los niños, tenía alta mortalidad o causaba ceguera y desfiguraba rostros. Una variedad era tan mortal como el propio ébola.

Según la real orden el rey, celoso de la felicidad de sus vasallos, se sirvió resolver, pido el dictamen del consejo y de algunos sabios, que se propague a las dos américas, y si fuera posible a las islas Philpinas a costa del Real Erario, la inoculación de la vacuna, acreditada en España y en casi toda Europa como un preservativo de las varicela naturales.

Balmis vio que el único método para transportar el remedio en perfectas condiciones era utilizando seres humanos. Inglaterra intentara usar vacas, pero no fue posible. Y hasta entonces se usaba pus fresco entre dos cristales, pero cuando el producto llegaba a América los virus eran inviables.

No existía la técnica y Balmis tuvo la idea de dudosa ética pero efectiva, el médico sugirió utilizar 22 niños huérfanos que hicieran transmisores del virus.

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Los niños fueron reclutados en el orfanato Casa de Expósitos de la Coruña, se contrató a la rectora del centro Isabel López de Ganalia, finalmente el 30 de noviembre de 1803 zarpó del puerto la corneta "Maria Pita" con los 22 niños huérfanos, Balmis 2 médicos asistentes, 2 prácticos 3 enfermeras y la rectora del orfanato.

Durante la travesía, Balmis practicaba en los niños una incisión con una lanceta y les inoculaba el virus. Al cabo de diez días aparecían unos granos de los que salía un valioso fluido que servía como vacuna.

Los granos se secaban por lo que el médico tenía que ir infectando otros niños sucesivamente.

Poco después de un mes, los niños salvadores llegaron a Puerto Rico. Dos murieron en la travesía. Tomás Metijón y Juan Antonio, de tres y cinco años y fallecería otro más antes de llegar a Mexico.

A lo largo de dos Años la expedición de Balmis, fue vacunando niños a lo largo de América. Para hacerlo siguió reclutando niños de orfanatos para que transportaran la vacuna en sus cuerpos. Poco se sabe del destino de aquellos héroes forzados, algunos fueron acogidos por familias y otros terminaron en hospicios ante la incomprensión de algunas autoridades y el recelo de la Iglesia contra la vacunación.

Balmis llegaría hasta Filipinas y Macao. Su historia merecería una de esas películas inolvidables de increíbles aventuras. Se habló alguna vez de un film protagonizado por Luis Tosar y José Coronado pero el proyecto no caló.

En la Coruña, ante el Domus unas placas recuerdan a los 22 pequeños héroes. Alguno de aquellos huérfanos llegaron a dar su vida para salvar la de otros ante la viruela. La enfermedad que más muertes causó en la historia de la humanidad.

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Perdón es el virus de la Viruela no de la varicela. Si algún admin puede cambiar en los comentarios/entradilla agradecido quedo.