Con diez años subió a los escenarios para tocar la primera arpa celta que su padre, Georges Cocheveleou, músico y luthier, construyó rescatando un insutrumento perdido desde la Edad Media. Veinte años después, en 1973, su directo en el Olympia de París fue un éxito internacional, con dos millones de copias vendidas y varios himnos inevitables en cualquier fiesta folk o en cualquier colección de discos en la época del fervor celta. Aquí paso la fiebre, pero Alan Stivell, que acaba de cumplir 70 años, nunca dejó de grabar y de hacer conciertos.
Comentarios
Así que descubrín un xeito diferente de vivir a noite. Despois estaba tamén o entusiasmo da xente, na que notaba algo explosivo e recente. Sempre que fun a Galicia notei esa sensación de xente que ten un entusiasmo incrible, sempre a bailar diante do escenario. Iso dáche optimismo, enerxía.
Non hai festa que se precie se non se baila diante do palco.
Me encanta su Brian Boru
Le vi hace unos cuantos años ya en el festival de Lorient... un concierto maravilloso
Traducido al castellano: https://www.publico.es/culturas/alan-stivell-druida-existe.html
Matizar que en la entradilla se refiere al arpa bretona.