El papa Inocencio VIII terminó prohibiendo todas las tesis que Pico había contemplado tratar en su debate. Y es que sus ideas, de haberse expandido a España, habrían generado toda una revolución. O al menos eso pensaba el cardenal español Pedro Garzias, quien previno a sus soberanos, Fernando de Aragón e Isabel la Católica, del peligro que representaban las ideas prosemíticas de Pico si llegaban a España.
Comentarios
¿Que pudo evitar, o que pudo haber evitado?
Menudo podemita. Menos mal que lo ahorcaron
Echamos a los buenos y nos quedamos con los malos...