Hace 1 año | Por geralt_ a odditycentral.com
Publicado hace 1 año por geralt_ a odditycentral.com

El kaketsugi (literalmente, "reparación invisible" en japonés) es una increíble técnica japonesa de reparación de telas que consiste en reparar la ropa dañada hasta el punto de que ni siquiera se note que está dañada [...] la reparación con aguja e hilo es un oficio que está desapareciendo poco a poco. Pero ¿qué pasa con las prendas especiales, qué ocurre cuando algo verdaderamente especial y querido por nuestros corazones se estropea? No se puede ir a reponer algo de valor sentimental, pero tampoco se puede llevar con un agujero.

Comentarios

D

#2 Pues tu madre era una artista, como esta gente.

Xenófanes

#15 Sí mi madre lo hacía así también. Ella trabajaba de eso en Reino Unido y eran sobre todo trajes ya que era bastante común tener contratado un seguro para arreglar los daños que pudieran sufrir.

Soiber

#2 #19 mi bisabuela igual.

c

#2 Mi madre lo hacía y me enseñó. Ella reparaba incluso medias.

noexisto

#2 Mi madre Zurzía también muchas cosas (no eran muy invisibles, no lol)
Tenía todos los pantalones o con remiendos o con refuerzos porque como niño no veas si era un destroyer lol
Hay cosas que recuerdo con mucho Cariño como algunas colchas que tenía con diversos restos de tela. Sin duda no tiraba nada (cosas de haber pasado una postguerra)

guaperas

#2 supongo que esta tecnica de restauración se llevará aplicando en Europa en restauración de tapices, pero como nos la presentan con ombre japonés ahora nos parece algo místico

Rokadas98

#2 Algo similar es el coger puntos a las medias, tengo recuerdos de pequeño cuando llevaban las mujeres las medias a la zurcidora para repararlas.

D

#10 La verdad es que lo pensé cuando leí el artículo, aunque no sabía cómo se llamaba Mi positivo.

mecha

#10 vaya, pues pensaba que era una broma. Que decepción

Aún así, mi positivo para los dos por la información.

mecha

#3 te votaría positivo pero no he entendido nada

geralt_

Traducción automática:

El kaketsugi (literalmente, "reparación invisible" en japonés) es una increíble técnica japonesa de reparación de telas que consiste en reparar la ropa dañada hasta el punto de que ni siquiera se note que está dañada.

Ahora que la moda rápida es más popular que nunca, la reparación de telas ya no es tan necesaria como antes. ¿Tienes una rotura en uno de tus calcetines? Tíralo a la basura y compra un par nuevo, son baratos y fáciles de conseguir. Lo mismo ocurre con prácticamente cualquier otra prenda, por lo que la reparación con aguja e hilo es un oficio que está desapareciendo poco a poco. Pero ¿qué pasa con las prendas especiales, qué ocurre cuando algo verdaderamente especial y querido por nuestros corazones se estropea? No se puede ir a reponer algo de valor sentimental, pero tampoco se puede llevar con un agujero. Ahí es donde entra el mágico arte del kaketsugi.

Como su nombre indica, esta técnica única de reparación de telas consiste en arreglar daños como agujeros en la tela o hilos muy rotos de forma que la prenda acabe pareciendo como nueva. Parece demasiado bueno para ser verdad, pero hay muchas imágenes disponibles en Internet que documentan el procedimiento y el asombroso resultado.

Hace unos años, un reportaje sobre el kaketsugi realizado por la cadena de televisión surcoreana SBS se hizo viral. Se centraba en el trabajo del artesano japonés Takao Matsumoto, que llevaba más de 55 años utilizando esta técnica para restaurar ropa. Aunque Matsumoto no es el único versado en el arte del kaketsugi -la cadena japonesa NHK presentó el año pasado a un equipo de padre e hija, Kataoka Tesshu y Goto Yoshiko-, el número de estos maestros es indudablemente cada vez menor.

El kaketsugi es un proceso minucioso que comienza con la extracción de un pequeño trozo de tela del interior de la prenda, donde no se notará su ausencia. A continuación, este trozo se cepilla con una solución a base de acetona que facilita la extracción de los hilos individuales.

Desnudar el trozo de tela hasta los hilos individuales es probablemente la parte más laboriosa del kaketsugi, pero los maestros de este oficio afirman que utilizar exactamente la misma tela de la que está hecha la prenda es esencial para que el zurcido sea realmente invisible al final.


Los hilos recién obtenidos se cosen cuidadosamente sobre el agujero o la zona dañada de la prenda, desde múltiples direcciones y desde ambos lados de la tela. Una vez completado el proceso de costura, se aplica un adhesivo sobre la zona reparada, y los hilos sobrantes se utilizan para enmascarar aún más el daño.

Por último, se plancha la zona reparada con kaketsugi. Esto ayuda a alisar todo y, en este punto, es casi imposible ver dónde estaba el agujero en primer lugar. La prenda tiene un aspecto impecable.

Curiosamente, el zurcido invisible funciona igual de bien en los agujeros pequeños de unos pocos milímetros que en los grandes de más de 3 centímetros de diámetro. Sólo que una zona dañada grande tardará más en arreglarse, así que cuanto más grande sea el agujero, más cara será la reparación.

Según la página web de Kimono Totonoe, una empresa que dice emplear a maestros de kaketsugi, los precios de las reparaciones empiezan en 136 dólares + gastos de envío para agujeros de hasta 0,5 cm de diámetro y suben hasta 362 dólares + gastos de envío para agujeros de hasta 3 cm. Todo lo que sobrepase esta cifra tendrá que cotizarse por separado, en función del tejido y la complejidad del trabajo.

El zurcido invisible kaketsugi puede parecer caro, pero hay que tener en cuenta que suele reservarse para prendas especiales con valor sentimental o histórico. Además, el trabajo y el tiempo que se invierte en él merecen una compensación adecuada.

wachington

Había leído reparación invisible de tetas.
Y yo pensaba, ¿como se estropean unas tetas?
¿Será ampliación de tetas?

Finalmente, leí la entradilla y salí de mi error.

H

#5 eso es por que eres un machista patriarcal y muy de derechas

OCLuis

Tratándose de los japoneses me imaginaba como lo harían, pero pensé imposible... empecé a ver el vídeo y seguía pensado imposible...
Y una #~@½ como una olla.

JanSmite

Sencillamente brutal

KirO

Pfff me vendría genial para un chinazo que tengo en el asiento del coche desde hace años...

Richaldor

#9 deja los canutos que ya eres mayorcete

KirO

#28 tanto el coche como yo somos ya mayorcetes

Encima fue un pasajero fumando tabaco de liar, ni siquiera hay una historia épica detrás del chinazo.

t

Mi madre estuvo haciendo eso durante 30 años. Que comunmente se llama zurcido. Lo aprendió de las monjas (ella fué monja en su día) y estuvo zurciendo hasta que le falló la vista y tuvo que dejarlo. Trabajaba para sastrerías y clientes privados, le mandaban piezas de todos los puntos de la geografía de España. Hasta piezas de museos como banderas y vestidos antiguos

Yomisma123

Yo funciono con parches de colores y remiendos más o menos culo pollo

D

Quién es la buena persona que nos ahorra un click? lol

Yomisma123

#11 Le ponen un parche rectangular, sacado de la propia tela (de otra parte, un bajo, un forro, un dobladillo,..) y lo cosen entrelazando el tejido punto a punto

D

es un trabajo de chinos

xyria

¡Fascinante! Parece cosa de magia...

La_Abuelita

Le voy a mostrar el video a mi costurera... ¡a ver qué opina! roll

Abril2022

Ni con photoshopshugi hubiera quedado tan bien

y

Había leído reparación de "tetas"

Richaldor

¿Pero qué clase de magia es esta??
Sobre el minuto 3:40 se ve el parche a medio coser con muchos hilos por los lados y luego al darle la vuelta con un par de toques de plancha y un papel de esto para coger bastillas al volver a darle la vuelta han desaparecido por completo los hilos del parche...

¿Qué me he perdido?

swapdisk

#27 Los hilos que ves son los sobrantes. La unión con la tela ya no se ve. Luego tira de los sobrantes para el revés, los fija y los recorta.

Lo que no se ve en este vídeo que sí que se ve en otros es que luego "espabila" la urdimbre con la aguja para que no quede una zona con tensiones de forma que no se note.

Richaldor

#31 vaaaale, Uf qué trabajará tiene esto

r

En el sector textil catalán existía multitud de mujeres que hacían esto. Las llamaban cosedoras de piezas y reconstruían las piezas tejidas, o las que presentaban imperfecciones, mal pagadas y trabajo en negro siempre. Todo un oficio del que queda poca gente que sepa hacerlo.