Esta es la historia de Guillaume Le Gentil, el que posiblemente sea el viajero con peor suerte de la historia. Naufragios, huidas por ser considerado espía y una mala suerte que hizo que una nube ocultara sus esperanzas. Al volver a casa lo que encontró fue un drama también...
Debían ser otros tiempos. Yo me hubiese dedicado a mejorar los instrumentos astronómicos, y a trabajar con modelos matemáticos que explicaran el comportamiento de estrellas y planetas. Lo de observar un tránsito de un planeta o un eclipse lo tendría como algo secundario.
En la actualidad cuando a alguien le pierden una maleta abre un blog para contar su trauma. El siglo XVII eran otros tiempos. Antes todo esto era campo.
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Debían ser otros tiempos. Yo me hubiese dedicado a mejorar los instrumentos astronómicos, y a trabajar con modelos matemáticos que explicaran el comportamiento de estrellas y planetas. Lo de observar un tránsito de un planeta o un eclipse lo tendría como algo secundario.
En la actualidad cuando a alguien le pierden una maleta abre un blog para contar su trauma. El siglo XVII eran otros tiempos. Antes todo esto era campo.
pero con la suerte de seguir viviendo para contarlo