El Colegio de Médicos de Portugal propuso hoy gravar con un impuesto la llamada comida rápida para penalizar las prácticas poco saludables y evitar futuros cortes presupuestarios en el Sistema Nacional de Salud (SNS)."El impuesto selectivo sobre basura alimentaria contribuirá para financiar el SNS y mejorar la salud de los portugueses", argumentó Silva, quien enumeró "la sal, las hamburguesas, las venenosas bolsas de patatas fritas y los embalajes de decenas de variedades de basura alimentaria" como posibles productos a tasar.
Comentarios
Siempre me ha hecho gracia que se critique a las hamburguesas y no al potaje, al cocido o a la fabada: Son tan dañinas como una hamburguesa si no más pero como son del terruño pues...
Interesante...
Pues yo como sólo hamburguesas porque no tienen tierra. Me da grima cuando la mastico.
¿La sal? Se han pasado un poco, ¿no?