Después de haberse currado las fotos, página a página, de la última novela del pequeño y repelente mago antes de su publicación, al fotógrafo que después subió su "obra fotográfica" a internet pueden cazarlo. Ya se sabe que sacó las fotos con una Canon Rebel 350, y en qué país se vendió la misma. Si ya ha sido revisada en el servicio técnico (cosa que estiman probable, pues la cámara ya tiene 3 años), el nombre del autor aparecerá... como por arte de magia.
Comentarios
¿Porque no esperar hasta el sábado?
¿Por qué es una provocación? No quería provocar a nadie
#1 este vídeo lo explica todo
Quien esté interesado en leer el libro (como yo) no se dedicara a mirar estas cosas en internet. No pienso dejar que me estropeen el final.