Hace 13 años | Por zordon a elmundo.es
Publicado hace 13 años por zordon a elmundo.es

Lo que queda del 'pisito' que le puso Mattel en Shanghái a su hija predilecta, hace ya dos años, no es más que un cadáver rosa de seis pisos en el 550 de Huaihai, en pleno corazón comercial. A la entrada, ahora cerrada a cal y canto, Barbie observa desde un póster a quienes pasean por el equivalente chino a la Quinta Avenida neoyorquina. Todos ajenos a la última marca global que fracasa en un mercado que se cacarea prometedor pero que, a la hora de la verdad, resulta extremadamente caprichoso.

Comentarios

zordon

Se que puede ser un poquito irrelevante. Pero odio a Barbie y estas noticias me producen una gran alegría

trollinator

Un gato sin boca ha ganado a una rubia descerebrada (no por rubia, pero siempre me ha parecido que tiene pinta de imbécil). Hoy es un gran día para la humanidad.

D

Normal, con las garras que tiene.