Hace 11 años | Por Goyalei a deia.com
Publicado hace 11 años por Goyalei a deia.com

Una madre de origen cubano obligó a su hijo de 3 años, a tatuarse en el brazo el número 666, cifra que identifica a un miembro de la secta 'Creciendo en gracia', según relatan varios medios sudamericanos en sus ediciones del lunes. La acción, grabada en vídeo muestra al niño llorando desesperadamente mientras las agujas atraviesan su piel. El pequeño, desesperado intentaba escapar a aquella tortura, pero tres adultos, entre ellos su madre, le sujetaban y le forzaban a sufrir ese dolor.

Comentarios

D

Igual de aberrante que quitar un trozo de prepucio a los niños sin necesidad

#3 Echan un chorrito y te inscriben en unas listas de por vida.

k

#7 Por supuesto.

D

#5, #3 ok. Pero te perforan la oreja, concretamente el lóbulo, no el oído .. no me seas tan bestia!!

s

la secta católica tiene por costumbre bautizar niños menores, y no se escandaliza nadie, el tatuaje es un rito sectario como otro cualquiera

k

#2 Lo mismo es que te echen un chorrito de agua en la cabeza que te tatuen. No sé puestos a buscar una semejanza, a mi particular modo de de vista tan cruel, el hacerle los agujeros en los oidos a las nenas para ponerles pendientes.

D

#2 y como los agujeros en las orejas de las niñas ... aquí, cada uno hace con sus niños lo que le da la real gana (por desgracia)

#3 no. Pero lo mismo es que te tatúen a que te perforen la oreja.

k

#4 Me has pillado con el mismo argumento pero no me había dado tiempo a terminar de escribirlo.

Alfa989

Es de la secta del puertorriqueño ese que dice que es la reencarnación de chuscristo pero que le nota que no se lo cree ni él. lol

Catacroc

Me encanta el titular por que casi no hacen amarillismo, 'las agujas atraviesan su piel' y 'le forzaban a sufrir ese dolor'.

LLort_II

#11 Sin "delicada piel" ni "lacerante dolor", na de na.

tiopio

Y en el pito: RECUERDO DE CONSTATINOPLA

D

Y lo que va a fardar en el cole... (mode bart off)

Potopo

¿Cómo era aquello?, ah si... Son sus costumbres y hay que respetarlas.