A todos nos gusta soltar de vez en cuando un latinajo, como se suele decir: alguna expresión latina que, aparentemente, nos hace “quedar de cultos”. Efectivamente, muchas de ellas, bien usadas y en moderación (cabe aquí citar a Horacio), pueden elevar la calidad del discurso. El problema es que, más a menudo de lo que resultaría óptimo, estas expresiones latinas se emplean mal, ya porque no encajan en el contexto (se emplean para referirse a algo que no es lo que realmente significan) ya porque se escriben o pronuncian mal.
Comentarios
Que chévere mi amor!!
No me puedo creer que la hayan votado antigua.
#2 Claro, cita a Horacio! ¿Lo quieres más antiguo?
Quo usque tandem abutere, Catilina, patientia nostra? [¿Hasta cuándo, Catilina, abusarás de nuestra paciencia?]
#4 Creo que es como sigue:
Quousque tandem, Catilina, abutere patientia nostra?
(http://es.wikipedia.org/wiki/Catilinarias_(Cicer%C3%B3n))