Hace 12 años | Por --175578-- a youtube.com
Publicado hace 12 años por --175578-- a youtube.com

Se habla frecuentemente que si se eliminan los 10.000 millones de subsidios a la iglesia se pueden crear 400.000 puestos de trabajo, o evitar "automágicamente" la extensión de la edad de jubilación (http://bit.ly/m8Wdgm) (http://bit.ly/izvbVP) Pero las aritméticas y economía básica (y sentido común) indican lo contrario. No es tan fácil, al contrario que el populismo y la demagogia.

Comentarios

a

Ricardo, seguro que pretendías ser serio, y admito cierta demagogia en los números propuestos por Cayo Lara, pero he detectado olvidos importantes en tu discurso. Lo primero que tengo que reprochar, es que si bien desprivatizar la enseñanza no puede hacerse de la noche a la mañana, (tus números hablan de eso) hagámoslo en algo más de tiempo ¿no? Y por encima de todo, no permitamos el perverso proceso inverso de privatización de la enseñanza que es donde estamos.

Es decir, se está destruyendo educación publica y ayudando a la privada cada vez más, y eso hay que pararlo por varios motivos. Para empezar, a la concertada hay que quitarla las subvenciones si se dedican a impartir ideología en lugar de conocimiento. La ideología de los niños pequeños que se la curre cada familia por su cuenta. La ideología, y más la religiosa, no es algo inofensivo. Quizás te falta el puntito de la necesaria beligerancia atea.

En segundo lugar, si falta dinero para educación lo primero que habría que recortar son las subvenciones a las privadas, y si los papas tienen tanto interés en la privada que paguen un poco más de sus bolsillos. Siempre podrán ir a la pública si no quieren pagar más. La privada no tiene porqué ser semigratuitas y menos si se imparte ideología.

Las ideologías, se permiten por razones de derechos humanos, es lo justo, pero el estado no puede dedicarse a alimentar con el dinero público la ideología que más le convenga, y fomentar sociedades de pensamiento único. Ni religión, ni educación para la ciudadanía.

La dominación católica en toda Europa es algo promovido historicamente desde los estados. No podemos seguir favoreciéndolas con la excusa de que son mayoritarias, porque son mayorías que no han nacido en la libertad de elección de los ciudadanos.

Todas las ideologías, las de izquierda, las de derechas, las religiosas, etc. son instrumentos de manipulación, porque se diseñan con un paquete de ideas congeladas en el tiempo. De esa forma la insistencia en la repetición de los mensajes consigue aborregar a la gente que llega a sumirlos y a propagarlos de forma vírica ,sin ni si quiera entenderlos. Se llega a tales extremos de borreguismo seguidista, que en el caso de la religión, la gente se traga promesas de premios postmortem basados en la nula evidencia.

Yo no me caso con nadie, y tomo de cada ideología las ideas que considero válidas y rechazo el resto. A la gente hay que educarla en la libertad de pensamiento no en el adoctrinamiento vírico.

Hay gente que sólo lee ciertos periódicos y considera manipuladores al resto. Creo que todos son manipuladores, y contrastar la información en varios medios ayuda a formarse una opinión auténticamente personal.

La educación privada en España no es neutral. Forma parte de la estrategia de un proselitismo católico que condiciona de forma extraordinaria a la sociedad. Del dinero destinado a educación, Algunas nóminas van a profesionales abducidos por la secta, pero otras van a para directamente a los administradores de la fe y me niego a llamarles trabajadores. Esa gente tendría que vivir exclusivamente de las aportaciones voluntarias e individuales de sus fieles que son los únicos que valoran sus monsergas idiotizantes.

Creo que la intención del vídeo es buena, porque Cayo Lara no me parece demasiado realista en sus planteamientos, y los objetivos educativos no se conseguirán con medidas efectistas de cara a la galería.

Creo que algunas propuestas van dirigidas a gente muy indignada, y por ello manipulable. La educación es un tema serio, y se necesita usar el sentido común y la calculadora en la línea que tu has pretendido, pero creo que te ha faltado cargar las tintas contra el problema que supone privatizar la enseñanza, porque es lo que se está haciendo ahora, en las autonomías gobernadas por el PP, sin admitirlo, y el PSOE no hizo otra cosa que bailar el agua a la bendita Iglesia Católica, para no perder esos votos.

Hay mucha gente de izquierdas, incluso políticos, que llevan a sus hijos a la privada por muchas razones. Las principales son cercanía del centro, y una calidad de enseñanza superior. La privada está rechazando a alumnos con necesidades especiales que van a parar a la pública, y por eso la pública con esos alumnos no puede ofrecer la misma calidad de enseñanza que la privada. A cambio de ello los padres permiten que sus hijos acudan a escuelas donde se les imparte ideología católica.

Si lo que se quería transmitir con este vídeo es que la gente debe ser más crítica y más objetiva y no creer los números que presentan los políticos en campaña electoral, estoy de acuerdo, pero nos jugamos mucho en educación y la situación de de lavado de coco de los pequeños es intolerable.

No todos los ateos son beligerantes, yo sí, y creo que es necesaria esa beligerancia para no ceder continuamente terreno ante un catolicismo, que por su naturaleza es muy beligerante. Nuestra constitución dice que somos un estado aconfesional, pero España funciona de facto con una confesionalidad católica plasmada en el concordato con la Santa Sede que agravia por comparación al resto de las confesiones.

Al margen de la confesionalidad o no de España, el proselitismo con niños pequeños usando dinero público es algo inadmisible en una democracia que ha de defender, y hacer valer, la libertad de pensamiento. La ideología infantil es una responsabilidad familiar intransferible. Cada uno que se pague sus necesidades ideológicas.

NOTA: Lo he posteado tal cual en mi Blog. Considero que es un tema muy importante en el cual Ricardo acierta en algunos detalles interesantes, y quizás (es mi opinión) perdió de vista lo más importante.
http://www.ciberdroide.com/wordpress/ricardo-galli-en-su-video-olvida-mencionar-lo-realmente-importante/

gallir

#2


No sé si no me queréis entender, o soy yo el que se explica fatal

No estaba hablando de religión o ateísmo, soy un convencido que no debería existir la educación religiosa financiada con dinero público directa o indirectamente. Pero no estaba hablando de eso, sino de puros números, y las aritméticas no son religiosas o ateas, son números fríos.

Todo surgió de dos temas. Primero lo de Cayo Lara que dijo que si se les corta los 10.000 millones a la iglesia se podrían crear 400.000 puestos de trabajo, supongo que no hace falta que expliquelo ridículo de esa afirmación. Pero el vídeo lo hice después de un tweet (creo que dekuriosokurioso) que decía:

"Con los 10.000 millones que se da a la iglesia se evitaría el retraso de la jubilación".

Supongo que tampoco hace falta que lo vuelva a explicar, porque de eso va el vídeo, de explicar los números y cuentas básicas que hay que hacer antes de soltar semejante demagogia.

Insisto, aplaudiré al que me venga con un plan de normalizar finalmente la educación pública universal y única eliminando el parche de la concertación para cubrir lo que el estado no pudo, o no quiso. Aplaudiré con las orejas que tengamos realmente un país laico, o aconfensional, como quieras. Pero no puedo acepar que hagan afirmaciones demagógicas que son matemáticamente imposibles.

No puedo entender que la ideología, o los fines, justifiquen los medios, incluso a ignorar completamente las cuentas básicas.

tollendo

De acuerdo. Una cosa es ser ateo y otra ser demagogo.

a

(Te contesté en mi Blog, pero podemos seguir aquí, copio la última respuesta)

Te aseguro que he querido entenderte y veo por donde vas. Te has centrado en un aspecto olvidando otros que creo son esenciales. Sólo es eso lo que yo quiero destacar. Eso y destacar que dejar de subvencionar a la pública es posible aunque no sea sencillo. Es una cuestión de voluntad política y de coherencia democrática.

Hay que dotar a la pública de más medios para que sea capaz de absorber a todo aquel que no quiera una privada, que como es lógico si no se subvenciona, tendrían que pagar de su bolsillo. La privada sería mucho más cara, pero esa no es una razón para continuar subvencionándola y hacerlo cada vez más.

Para que una privada sea subvencionable tendría que cumplir ciertos requisitos de neutralidad ideológica y de garantía de acceso universal a sus alumnos. Es decir, de no discriminación de los alumnos. Emigrantes, gitanos, y discapacitados son derivados a la pública con toda clase de tretas, y los demás a la privada. Es repugnante subvencionar a la pública en esas condiciones.

¿Cuantas escuelas neutrales y subvencionables quedarían si tuvieran que cumplir un mínimo de requisitos democráticos? Esos son los números que hay que hacer.

Mientras se regale dinero a La Iglesia la Iglesia irá necesitando más y más. El 80% del patrimonio histórico artístico necesita mantenimiento y es propiedad de la iglesia. Cuantos más templos, y más grandes sean estos, mejor para la Iglesia, pero que el estado pague todo eso es repugnante. Sobran templos a punta pala.

La Iglesia es un gigante omnímodo que no se ganó su poder. Se lo regalaron los estados corruptos interesado en amansar a los pobres prometiéndoles premios postmorten.

Naturalmente que es posible dejar a la privada sin subvención, pero los efectos de siglos de dominación católica no se pueden corregir de un día para otro. Nuestra infraestructura educativa está totalmente invadida por el catolicismo.

Hay que ir poco a poco saneando todo eso y metiéndoles en cintura. El problema es que ahora vamos en dirección contraria. Se están cargando la educación pública y lo estamos viendo. ¿Las privadas no han salido a la calle verdad?

D

Es tan evidente que Cayo Lara pretendió hacer un símil del total de dinero que el estado facilita al adoctrinamiento gestionado por la única teocracia que persiste en occidente, que éste comentario resulta en si mismo demagógico.
Pero, entrando a los contajes, no llegan a 4.000 millones los dineros a la concertada. Concertada donde, como reconoce Galli, hay más masificación en las aulas, salarios indignos, partidas ocultas como las cesiones de terrenos millonarios o evidencias no comentadas como que se trata de negocios privados que se gestionan como tales, con ánimo de lucro. Ánimo de lucro que no está presente en la pública. Paralelamente la concertada evita ilegalmente población no autóctona, que tiene derecho a la educación en igualdad.
Respecto de que cuesta más la pública... ofrece cobertura allí donde no pondría la privada un centro: muchos pueblos con 5 niños cuentan con plantel de profesorado, sin ir más lejos. La privada se asienta en zonas o elitistas o con una elevada densidad de población infantil, para asegurar su negocio privado.
Pero tras eliminar la demagogia de que la privada cuesta menos al mostrar datos que implican que tal negocio al serlo, es selectivo, digamos que hay que dedicar ese dinero a la pública, por ejemplo dedicando los dos primeros años todo el dinero a la creación de centros públicos y sus dotaciones, reciclando el profesorado entonces excedentario de la privada hacia unas mejores condiciones laborales (lucha por la que sorprende que Gallí, profesor universitario, se desentienda)
En fin, que gracias a eliminar esos subsidios a una ideología totalitaria, podríamos mejorar la calidad y cobertura del sistema educativo como primera medida, además de crear puestos de trabajo fijos y evitar los actuales recortes en la educación que tarde o temprano lastrarán el futuro de todos.
Una vez cumplida la reinversión, tendremos un fondo más que notable para destinar a otras actividades sociales tendentes al bien común, como la difusión del pensamiento crítico y la ciencia.
El apartado doctrinario es muy relevante y lo ha reseñado muy bien acastro.
De modo que en fin, me resulta tonto que Gallí se haya tomado la molestia de usar su tiempo en crear un vídeo para desmentir lo que no se dijo ni se pretendió. Esto me huele a electoralismo tendencioso a la legua