El mes pasado, un estudio elaborado por dos universidades europeas (Munich y Copenhague) causó polémica al afirmar que la lucha contra la piratería perjudicaba a las películas independientes. Ahora, otra universidad teutona publica un análisis capaz de enfrentar a dos instituciones de las salas de cine: el consumo de palomitas de maíz y el visionado de tráilers.
Comentarios
Es dupe
ES DUPE
Palomitas, si me da tiempo, pues ya veo los trailers. Por cierto, interesante el artículo
Pues los trailers, que son más grandes.
A ver qué va a hacer una palomita contra un camión.
Verdaderamente el beneficio de los cines se lo dan las palomitas, las bebidas y demás chuches.
El sonido del vecino de butaca comiendo palomitas suele distraer más que el consumo propio
Porque del precio de la entrada ni hablamos, no?