Su vida en España es cada día más difícil y cualquier golpe se vuelve más doloroso. Y el último ha sido durísimo. En un fin de semana han visto cómo un amigo moría asesinado y cómo otro entraba en la cárcel. La comunidad marroquí de Roquetas de Mar (Almería) vive en alerta. La crisis, que ha dejado en paro a muchos inmigrantes que trabajaban en la construcción, ha tensado aún más su situación. En algunos casos, los extranjeros que pierden el empleo se quedan también sin papeles y esto les provoca mucho más estrés.
Comentarios
Lo de Almería es cojonudo:
si le echas un vistazo a estadísticas de jornaleros y dueños de invernaderos, te darás cuenta de que en todo este tiempo de invernaderos no hay apenas dueños extranjeros, y apenas trabajadores españoles.
Luego es chocante que ante la crisis, a echar a los jornaleros; quizás habría que echar a unos cuantos nuevos ricos.
No veo racismo ni xenofobia por ningun lado en este caso, sólo pobreza ,violencia , incumplimiento de las leyes y capitalismo salvaje donde la oferta y la demanda nunca se estabilizan.
Xenofobia racismo y otros males se apoderan de las ciudades.....