El fragging es una modalidad de asesinato practicada por soldados estadounidenses contra sus propios mandos u otros soldados que ponían en peligro a la unidad por su imprudencia o incompetencia o que trataban de imponer la disciplina militar. La práctica consistía en lanzar una granada, pero también podía ser con otro método, a la persona peligrosa para la unidad y atribuir la muerte al enemigo. En Vietnam se contabilizaron más de 700 ataques a mandos poco populares; la mayoría de las fuentes creen que el cálculo es demasiado bajo.