Los ‘gorrillas’ han realizado durante años el cometido que la Entidad Pública Empresarial Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) adjudicará a una compañía en los próximos meses: ordenar la fila de taxis de la estación de Atocha y dirigir a los viajeros a los vehículos correspondientes.
Comentarios
Puff, es oír la palabra gorrilla y acordarme de Sevilla, con gorrillas hasta debajo de las piedras y no les des nada no...
Bah, eso se soluciona con un algoritmo de burbuja por mucho menos
#1 para que al final los viajeros andemos 30 metros para coger un cabify
#1 La Cifuentes ataca, tiene a la ciudad rodeada.
Qué cariño le tengo los taxistas , cada vez más
#3 gracias majo, ni sabía de ti, ahora el cariño es mutuo.