Moscú se está preparando para una guerra larga y agotadora. No hay forma de saber exactamente cómo se desarrollará, pero lo que es seguro es que las cosas están a punto de empeorar mucho para el pueblo de Ucrania, muchos más miles de personas morirán y el país tardará décadas en recuperarse. Deberíamos saber qué queremos de Ucrania antes de que mueran muchos más. Porque, tal y como están las cosas, así será, y sólo en favor de Putin.
Occidente cree que la guerra en Ucrania, si no está ganada, al menos no está perdida. Que la invasión rusa ha fracasado y que la heroica defensa ofrecida por Ucrania ha sido una gloriosa hazaña armamentística que ha frustrado las ambiciones de Putin. Sin embargo, la cuestión de quién está ganando y quién está perdiendo en Ucrania no es el simple juego de moralidad que nos gustaría que fuera. Y para verlo, deberíamos empezar por el principio.
El 24 de febrero de 2022, Putin declaró el inicio de la "Operación Militar Especial" de Rusia en Ucrania mientras las fuerzas invasoras atacaban desde varios ejes. La incursión a gran escala desde varias direcciones pretendía desorientar y abrumar a los ucranianos, mientras que las fuerzas rusas amasadas alrededor de Kiev estaban aparentemente diseñadas para coaccionar al gobierno a hacer concesiones de algún tipo.
Sin embargo, este enfoque inicial fracasó y el creciente coste humano y material de mantener las fuerzas rusas en la zona hizo que Rusia se retirara. El conflicto se convirtió entonces en una guerra de desgaste -para la que Rusia estaba preparada, estuviera o no preparada para la profundidad del apoyo occidental a Ucrania liderado por los angloamericanos- y así ha seguido desde entonces. Las cosas mejoraron para los rusos a finales de la primavera y durante el verano, cuando lograron grandes éxitos en la toma de Popasna, Lyman, Lisychansk, Severodonetsk y muchas otras ciudades.
Luego, el impulso cambió de nuevo en otoño, cuando Ucrania, reforzada por esa masiva ayuda militar y financiera occidental, así como por el apoyo multifacético de inteligencia y de objetivos, identificó y explotó partes de las líneas defensivas rusas en la región de Járkov que estaban gravemente infradotadas. La oportuna ofensiva resultante obligó a Rusia a abandonar un considerable trozo de territorio para preservar hombres y blindados.
A continuación, Rusia se retiró de la orilla occidental de Kherson, en el sur, debido a la presión ucraniana y a sus propios problemas logísticos. Aunque esto les permitió simplificar su defensa y liberar hombres y equipos para utilizarlos en otros lugares. Sin embargo, hay que señalar que durante todo este tiempo la organización rusa Wagner y otros efectivos alineados siguieron avanzando en el Donbass, creando las condiciones para lo que ahora son avances acelerados en la estratégica ciudad de Bajmut y sus alrededores.
Desde que las últimas fuerzas rusas cruzaron el río Dnipro en Kherson, interponiendo una barrera natural entre ambos bandos, la guerra se ha decantado gradualmente a favor de Moscú, y Ucrania se encuentra una vez más en desventaja. Rusia ha movilizado a más de 300.000 hombres, ha estabilizado sus líneas, ha reforzado significativamente sus posiciones defensivas con personal fresco y extensos sistemas de trincheras y barreras, y ha intensificado una intensa campaña aérea estratégica que, entre otras cosas, está paralizando la red energética de Ucrania. Además, sus fuerzas están llevando a cabo una serie de ofensivas locales que se extienden desde Zaporizhzhia, en el sur, a lo largo de los territorios de la DPR/LPR, hasta las regiones de Siversk, Lyman y Kupiansk, más al norte.
La línea defensiva más fuerte y fortificada de Ucrania, que se construyó en gran medida durante la era posterior a la guerra civil de Maidan, se ha visto gravemente comprometida con la caída de Soledar y parece a punto de derrumbarse con Rusia cada vez más cerca de tomar Bajmut. Además, se anticipa ampliamente que Rusia se está preparando para lanzar algún tipo de acción ofensiva intensificada en las próximas semanas o meses, a medida que acumula enormes cantidades de personal y blindados actualmente no comprometidos en Ucrania y sus alrededores.
A pesar de su caótico y desastroso comienzo de la guerra, así como de las impresionantes hazañas de Ucrania al expulsar a sus fuerzas de partes de Kharkov y Kherson, Rusia ha consolidado sus defensas y ha pasado a una estrategia centrada en aprovechar su considerable ventaja en potencia de fuego con el propósito expreso de reducir las fuerzas armadas de Ucrania. Cuando Putin declaró la guerra y planteó la "desmilitarización" como uno de los objetivos clave de la "Operación Militar Especial", iba en serio. Las ambiciones crecen en todas las guerras, pero este objetivo ruso era real, no una cortina de humo.
Cómo se está librando la guerra
El Teniente Coronel (retirado) Alex Vershinin, del Royal United Services Institute, ha ofrecido una acertada explicación de los enfoques opuestos de ambas partes en el conflicto, describiendo cómo "los rusos están librando una guerra de desgaste tradicional centrada en la potencia de fuego", mientras que "Ucrania está llevando a cabo una guerra de maniobra centrada en el terreno". Las guerras de desgaste "se ganan mediante una cuidadosa gestión de los recursos propios mientras se destruyen los del enemigo", afirma, y Rusia "ha preservado cuidadosamente sus recursos, retirándose cada vez que la situación táctica se volvía en su contra", señalando también que Moscú "entró en la guerra con una amplia superioridad material y una mayor base industrial para sostener y reemplazar las pérdidas".
Según él, ambas estrategias parecen funcionar, ya que "Ucrania ha reconquistado grandes franjas de territorio, pero se ha agotado durante la ofensiva de otoño", y "ha sufrido pérdidas espantosas y ha agotado reservas clave de equipo y munición". Para empeorar las cosas para los ucranianos, su "capacidad para reemplazar las pérdidas y establecer nuevas formaciones de combate... se están marchitando rápidamente".
En la actualidad, Rusia controla más del 15% del territorio ucraniano, va camino de hacerse con más, posee la mayor parte de su litoral y está degradando cada vez más las infraestructuras energéticas del país. La economía ucraniana se ha visto diezmada al tiempo que el país se despoblaba, y Statista contabilizaba más de 17,68 millones de cruces fronterizos a otros países a 17 de enero de este año, con millones de desplazados internos.
Por el contrario, Rusia cuenta con una sólida base industrial militar, una población mucho mayor que la de su adversario, un mayor número de profesionales y reservas militares a los que recurrir para futuras movilizaciones, la capacidad de lanzar sistemáticamente ataques con misiles y aviones no tripulados desde dentro y fuera de su territorio, una economía que sigue funcionando y está geográficamente rodeada por Ucrania, lo que facilita las rutas logísticas y las líneas de comunicación.
El Occidente liderado por Estados Unidos insiste en que Ucrania puede recuperar todo el territorio ocupado e infligir daños suficientes para obligar a Rusia a abandonar. Washington y sus aliados han impuesto duras sanciones a Rusia con la esperanza de estrangular su economía, espolear la presión interna contra la guerra e intentar provocar un cambio de régimen en el Kremlin; algunos hablan incluso de balcanizar el país. Estos objetivos parecen descabellados por el momento, dado el apoyo de la población rusa a la guerra, las protestas que se desvanecieron hace tiempo, las sanciones que no han cumplido las expectativas y el dominio de la vecindad de Rusia en la escala de escalada.
En 2016, el presidente Barack Obama se refirió a este último punto, admitiendo: "El hecho es que Ucrania, que es un país no perteneciente a la OTAN, va a ser vulnerable al dominio militar de Rusia hagamos lo que hagamos." Esto, combinado con la realidad de que la élite moscovita percibe la crisis ucraniana como una crisis existencial, hace muy improbable que Rusia simplemente se dé por vencida, reconozca su derrota y se marche por la salida más cercana. Irse causaría más problemas a los dirigentes rusos que quedarse.
Guerra existencial
El conflicto de Ucrania es, en gran medida, una guerra por poderes y muchos la han calificado como tal. Los principales políticos y autoridades militares estadounidenses han expuesto abiertamente su deseo de expulsar a Rusia de las filas de las grandes potencias y debilitarla todo lo posible mediante una guerra contra las fuerzas ucranianas respaldadas por Occidente.
Pero en este caso concreto, la balanza se inclina a favor de Rusia, que está librando en su propio patio trasero una guerra considerada existencial. Los motivos rusos para iniciar la invasión han sido ampliamente tergiversados por la prensa y los políticos occidentales. Además, les gusten o los detesten, la cuestión de la concepción rusa de sus intereses vitales acaba de ser ignorada. Y eso es analíticamente asnal.
El 24 de febrero de 2022, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó que la invasión "siempre tuvo que ver con la agresión desnuda, con el deseo de Putin de establecer un imperio por cualquier medio necesario". Gran parte de la clase experta de Occidente está alineada con este punto de vista, creyendo que si no se detiene a Putin en Ucrania, entonces continuará inevitablemente su supuesto impulso imperialista hacia nuevas tierras. Anne Applebaum afirmó que la derrota de Kiev sumiría a la OTAN en el caos, ya que "toda la alianza se vería obligada a gastar miles de millones en prepararse para la inevitable invasión de Varsovia, Vilna o Berlín".
Estas narrativas son patentemente infundadas, ya que la realidad es que la intervención de Rusia en Ucrania fue un acto de desesperación y no de fuerza. Como explicó sucintamente John Mearsheimer, Moscú considera que la política de Estados Unidos y sus aliados europeos trata de apartar a Ucrania de la esfera de influencia de Rusia e integrarla en Occidente. Estableciendo así un baluarte occidental en la frontera de Rusia mediante la expansión
#23:
#20 Aquí uno que se lo ha leído con fruición.
Respecto a lo que comentas sobre el hundimiento de todo lo que no sea propaganda occidental...en mi opinión es un sí pero no. Digamos que la mayoría no llega a portada PERO: los meneos en pendientes acostumbran a tener el doble de positivos que negativos, cuando no el triple. Pocas son las que cosechan más negativos que positivos. En cuanto a la portada, creo que llegan bastantes más noticias que cuestionan el relato o la propaganda occidental que las que se orientan a defender la postura occidental. También es verdad que en la cola de pendientes, veteasaberporqué , se suben pocas noticias de propaganda occidental y las que se suben suelen tener unos pocos acólitos sin demasiado éxito que suelen ser los mismos que votan negativo a las noticias que cuestionan el relato occidental. El caso más sangrante y que merece un estudio a parte es el envío diario del libelo de Revistaejercitos. Existe un desnutrido grupo que comentan sobre lo que no les gusta, pero no envían contenido con el que comulguen, veteasaberporqué . Un grupo de usuarios que no creo que pasen de 20-25, esto en casos extremos de peligro de portada, porque normalmente no pasan de 10 y casi siempre te encuentras con los mismos.
No creo que hayan bots y menos pagados. Esto es Meneame, como ellos mismos dicen, una burbuja con escasa influencia fuera del entorno. No es rentable pagar eso.
Y si te sirve de algo, yo entro a Meneame para subir el contenido que considero que debe divulgarse y para leer contenido como el que tú acabas de subir. Te deseo una larga y próspera vida
#5:
#1 es lo que tiene que la potencia militar regional te invada, que muere gente y te destruyen el país.
Eso de “dos no se pelean si uno no quiere” es algo que se dice a niños de parvulario, en este caso si uno no quiere luchar el otro lo mata. Y veo mucho argumento a favor de que uno no luche …
#19:
#8 El Mundo Libre ™ apoya a Ucrania para joder a Rusia, no para ayudar a Ucrania. Se nota que te has leído el artículo y, sobre todo, que no debe iros muy bien con la propaganda cuando hasta el Washington Post ya os va avisando...
Occidente cree que la guerra en Ucrania, si no está ganada, al menos no está perdida. Que la invasión rusa ha fracasado y que la heroica defensa ofrecida por Ucrania ha sido una gloriosa hazaña armamentística que ha frustrado las ambiciones de Putin. Sin embargo, la cuestión de quién está ganando y quién está perdiendo en Ucrania no es el simple juego de moralidad que nos gustaría que fuera. Y para verlo, deberíamos empezar por el principio.
El 24 de febrero de 2022, Putin declaró el inicio de la "Operación Militar Especial" de Rusia en Ucrania mientras las fuerzas invasoras atacaban desde varios ejes. La incursión a gran escala desde varias direcciones pretendía desorientar y abrumar a los ucranianos, mientras que las fuerzas rusas amasadas alrededor de Kiev estaban aparentemente diseñadas para coaccionar al gobierno a hacer concesiones de algún tipo.
Sin embargo, este enfoque inicial fracasó y el creciente coste humano y material de mantener las fuerzas rusas en la zona hizo que Rusia se retirara. El conflicto se convirtió entonces en una guerra de desgaste -para la que Rusia estaba preparada, estuviera o no preparada para la profundidad del apoyo occidental a Ucrania liderado por los angloamericanos- y así ha seguido desde entonces. Las cosas mejoraron para los rusos a finales de la primavera y durante el verano, cuando lograron grandes éxitos en la toma de Popasna, Lyman, Lisychansk, Severodonetsk y muchas otras ciudades.
Luego, el impulso cambió de nuevo en otoño, cuando Ucrania, reforzada por esa masiva ayuda militar y financiera occidental, así como por el apoyo multifacético de inteligencia y de objetivos, identificó y explotó partes de las líneas defensivas rusas en la región de Járkov que estaban gravemente infradotadas. La oportuna ofensiva resultante obligó a Rusia a abandonar un considerable trozo de territorio para preservar hombres y blindados.
A continuación, Rusia se retiró de la orilla occidental de Kherson, en el sur, debido a la presión ucraniana y a sus propios problemas logísticos. Aunque esto les permitió simplificar su defensa y liberar hombres y equipos para utilizarlos en otros lugares. Sin embargo, hay que señalar que durante todo este tiempo la organización rusa Wagner y otros efectivos alineados siguieron avanzando en el Donbass, creando las condiciones para lo que ahora son avances acelerados en la estratégica ciudad de Bajmut y sus alrededores.
Desde que las últimas fuerzas rusas cruzaron el río Dnipro en Kherson, interponiendo una barrera natural entre ambos bandos, la guerra se ha decantado gradualmente a favor de Moscú, y Ucrania se encuentra una vez más en desventaja. Rusia ha movilizado a más de 300.000 hombres, ha estabilizado sus líneas, ha reforzado significativamente sus posiciones defensivas con personal fresco y extensos sistemas de trincheras y barreras, y ha intensificado una intensa campaña aérea estratégica que, entre otras cosas, está paralizando la red energética de Ucrania. Además, sus fuerzas están llevando a cabo una serie de ofensivas locales que se extienden desde Zaporizhzhia, en el sur, a lo largo de los territorios de la DPR/LPR, hasta las regiones de Siversk, Lyman y Kupiansk, más al norte.
La línea defensiva más fuerte y fortificada de Ucrania, que se construyó en gran medida durante la era posterior a la guerra civil de Maidan, se ha visto gravemente comprometida con la caída de Soledar y parece a punto de derrumbarse con Rusia cada vez más cerca de tomar Bajmut. Además, se anticipa ampliamente que Rusia se está preparando para lanzar algún tipo de acción ofensiva intensificada en las próximas semanas o meses, a medida que acumula enormes cantidades de personal y blindados actualmente no comprometidos en Ucrania y sus alrededores.
A pesar de su caótico y desastroso comienzo de la guerra, así como de las impresionantes hazañas de Ucrania al expulsar a sus fuerzas de partes de Kharkov y Kherson, Rusia ha consolidado sus defensas y ha pasado a una estrategia centrada en aprovechar su considerable ventaja en potencia de fuego con el propósito expreso de reducir las fuerzas armadas de Ucrania. Cuando Putin declaró la guerra y planteó la "desmilitarización" como uno de los objetivos clave de la "Operación Militar Especial", iba en serio. Las ambiciones crecen en todas las guerras, pero este objetivo ruso era real, no una cortina de humo.
Cómo se está librando la guerra
El Teniente Coronel (retirado) Alex Vershinin, del Royal United Services Institute, ha ofrecido una acertada explicación de los enfoques opuestos de ambas partes en el conflicto, describiendo cómo "los rusos están librando una guerra de desgaste tradicional centrada en la potencia de fuego", mientras que "Ucrania está llevando a cabo una guerra de maniobra centrada en el terreno". Las guerras de desgaste "se ganan mediante una cuidadosa gestión de los recursos propios mientras se destruyen los del enemigo", afirma, y Rusia "ha preservado cuidadosamente sus recursos, retirándose cada vez que la situación táctica se volvía en su contra", señalando también que Moscú "entró en la guerra con una amplia superioridad material y una mayor base industrial para sostener y reemplazar las pérdidas".
Según él, ambas estrategias parecen funcionar, ya que "Ucrania ha reconquistado grandes franjas de territorio, pero se ha agotado durante la ofensiva de otoño", y "ha sufrido pérdidas espantosas y ha agotado reservas clave de equipo y munición". Para empeorar las cosas para los ucranianos, su "capacidad para reemplazar las pérdidas y establecer nuevas formaciones de combate... se están marchitando rápidamente".
En la actualidad, Rusia controla más del 15% del territorio ucraniano, va camino de hacerse con más, posee la mayor parte de su litoral y está degradando cada vez más las infraestructuras energéticas del país. La economía ucraniana se ha visto diezmada al tiempo que el país se despoblaba, y Statista contabilizaba más de 17,68 millones de cruces fronterizos a otros países a 17 de enero de este año, con millones de desplazados internos.
Por el contrario, Rusia cuenta con una sólida base industrial militar, una población mucho mayor que la de su adversario, un mayor número de profesionales y reservas militares a los que recurrir para futuras movilizaciones, la capacidad de lanzar sistemáticamente ataques con misiles y aviones no tripulados desde dentro y fuera de su territorio, una economía que sigue funcionando y está geográficamente rodeada por Ucrania, lo que facilita las rutas logísticas y las líneas de comunicación.
El Occidente liderado por Estados Unidos insiste en que Ucrania puede recuperar todo el territorio ocupado e infligir daños suficientes para obligar a Rusia a abandonar. Washington y sus aliados han impuesto duras sanciones a Rusia con la esperanza de estrangular su economía, espolear la presión interna contra la guerra e intentar provocar un cambio de régimen en el Kremlin; algunos hablan incluso de balcanizar el país. Estos objetivos parecen descabellados por el momento, dado el apoyo de la población rusa a la guerra, las protestas que se desvanecieron hace tiempo, las sanciones que no han cumplido las expectativas y el dominio de la vecindad de Rusia en la escala de escalada.
En 2016, el presidente Barack Obama se refirió a este último punto, admitiendo: "El hecho es que Ucrania, que es un país no perteneciente a la OTAN, va a ser vulnerable al dominio militar de Rusia hagamos lo que hagamos." Esto, combinado con la realidad de que la élite moscovita percibe la crisis ucraniana como una crisis existencial, hace muy improbable que Rusia simplemente se dé por vencida, reconozca su derrota y se marche por la salida más cercana. Irse causaría más problemas a los dirigentes rusos que quedarse.
Guerra existencial
El conflicto de Ucrania es, en gran medida, una guerra por poderes y muchos la han calificado como tal. Los principales políticos y autoridades militares estadounidenses han expuesto abiertamente su deseo de expulsar a Rusia de las filas de las grandes potencias y debilitarla todo lo posible mediante una guerra contra las fuerzas ucranianas respaldadas por Occidente.
Pero en este caso concreto, la balanza se inclina a favor de Rusia, que está librando en su propio patio trasero una guerra considerada existencial. Los motivos rusos para iniciar la invasión han sido ampliamente tergiversados por la prensa y los políticos occidentales. Además, les gusten o los detesten, la cuestión de la concepción rusa de sus intereses vitales acaba de ser ignorada. Y eso es analíticamente asnal.
El 24 de febrero de 2022, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó que la invasión "siempre tuvo que ver con la agresión desnuda, con el deseo de Putin de establecer un imperio por cualquier medio necesario". Gran parte de la clase experta de Occidente está alineada con este punto de vista, creyendo que si no se detiene a Putin en Ucrania, entonces continuará inevitablemente su supuesto impulso imperialista hacia nuevas tierras. Anne Applebaum afirmó que la derrota de Kiev sumiría a la OTAN en el caos, ya que "toda la alianza se vería obligada a gastar miles de millones en prepararse para la inevitable invasión de Varsovia, Vilna o Berlín".
Estas narrativas son patentemente infundadas, ya que la realidad es que la intervención de Rusia en Ucrania fue un acto de desesperación y no de fuerza. Como explicó sucintamente John Mearsheimer, Moscú considera que la política de Estados Unidos y sus aliados europeos trata de apartar a Ucrania de la esfera de influencia de Rusia e integrarla en Occidente. Estableciendo así un baluarte occidental en la frontera de Rusia mediante la expansión
#12 Gracias, lo iba a poner yo pero estaba en el móvil y dada la longitud no me permitía hacer un copia completa desde Deepl, demasiado trabajo ir por tramos.
#16 Eso ya se da por supuesto antes de enviarlo, todo lo que no sea propaganda occidental y dé la razón al relato oficial acaba hundido en pocas horas, para algo pagan a los bots.
Pero bueno, solo con que lo lea alguien ya merece la pena
Respecto a lo que comentas sobre el hundimiento de todo lo que no sea propaganda occidental...en mi opinión es un sí pero no. Digamos que la mayoría no llega a portada PERO: los meneos en pendientes acostumbran a tener el doble de positivos que negativos, cuando no el triple. Pocas son las que cosechan más negativos que positivos. En cuanto a la portada, creo que llegan bastantes más noticias que cuestionan el relato o la propaganda occidental que las que se orientan a defender la postura occidental. También es verdad que en la cola de pendientes, veteasaberporqué , se suben pocas noticias de propaganda occidental y las que se suben suelen tener unos pocos acólitos sin demasiado éxito que suelen ser los mismos que votan negativo a las noticias que cuestionan el relato occidental. El caso más sangrante y que merece un estudio a parte es el envío diario del libelo de Revistaejercitos. Existe un desnutrido grupo que comentan sobre lo que no les gusta, pero no envían contenido con el que comulguen, veteasaberporqué . Un grupo de usuarios que no creo que pasen de 20-25, esto en casos extremos de peligro de portada, porque normalmente no pasan de 10 y casi siempre te encuentras con los mismos.
No creo que hayan bots y menos pagados. Esto es Meneame, como ellos mismos dicen, una burbuja con escasa influencia fuera del entorno. No es rentable pagar eso.
Y si te sirve de algo, yo entro a Meneame para subir el contenido que considero que debe divulgarse y para leer contenido como el que tú acabas de subir. Te deseo una larga y próspera vida
#1 es lo que tiene que la potencia militar regional te invada, que muere gente y te destruyen el país.
Eso de “dos no se pelean si uno no quiere” es algo que se dice a niños de parvulario, en este caso si uno no quiere luchar el otro lo mata. Y veo mucho argumento a favor de que uno no luche …
#5 nadie ha argumentado que uno no luche -que yo haya visto/leído -. Muchos hemos cuestionado el tener que pagar nosotros su lucha, que es muy distinto.
#5 Cualquier gobierno que sea imprudente es un mal gobierno, independientemente de toda la retórica moral. Una invasión es una continuación de unas relaciones diplomáticas. Si Rusia era un monstruo cuando Georgia, es muy cínico pensar que ahora fuera a actuar de otra manera.
Yo me escandalizaría de quien quisiera echar a todas las bases americanas, a sus embajadores y a sus fondos de un día para otro... porque entiendo lo que es una potencia. Esto nadie lo ignora. Pero parece que hay excusas para fingir ser un ignorante dependiendo de lo sentimental que sea el discurso.
En estos asuntos “ganar” es absolutamente subjetivo. Estoy convencido de que cuando acabe todas las partes implicadas celebrarán su victoria con muchos aspavientos.
"Deberíamos saber qué queremos de Ucrania antes de que mueran muchos más"
Lo sabrán los ucranianos que son los que defienden su país del fascista de Putin. Como cualquier pueblo tienen el derecho de defenderse de un invasor.
Por eso el mundo libre apoya a Ucrania, mientras que a Rusia y al fascista de Putin solo le apoyan 4 países antidemocráticos y algunos fascistas llorones.
#10 Gente muy confundida en general, la mayoría de ellos demasiado viejos para ver que Rusia no es la URSS o demasiado jóvenes para distinguir la hoz y el martillo de un bitcoin.
#8 El Mundo Libre ™ apoya a Ucrania para joder a Rusia, no para ayudar a Ucrania. Se nota que te has leído el artículo y, sobre todo, que no debe iros muy bien con la propaganda cuando hasta el Washington Post ya os va avisando...
#19 El mundo libre apoya a Ucrania porque Rusia es un país amenazador, imperialista y expansionista, dirigido por un fascista que intenta perpetuarse en el poder y que lleva una buena temporada intentando interferir en los asuntos de otros países (seguramente para tapar sus problemas domésticos).
Como contrapartida no dejes de fijarte en que solo hay 4 países que apoyan a Rusia, casualmente socios del club antidemocrático.
Y el Washington Post manda un mensaje que ni te has parado a entender: NO es que Rusia vaya a ganar, sino que si no se sigue ayudando o se incrementa la ayuda a Ucrania, podría hacerlo.
#21 Claro claro, no es que el ejército ucraniano esté en la mierda, que lo está, es que si no seguimos enviando dinero y armas seguro que pierden, pero si seguimos enviando tardarán algo más en perder
Lo vuestro es digno de estudio, sinceramente, pero tranquila que ya queda poco, si los chinos dicen que esto se acaba para otoño lo más probable es que se acabe en otoño, esa gente no usa información de segunda categoría de la que te gusta tanto
#27 ¿con las cagadas de los rusos semana a semana? No se si Ucrania perderá, pero mientras el tiempo corre para el fascista de Putin. Si el chino (sí, es un dictador) dice que se acaba, da igual, porque el fascista de Putin no va a ceder hasta que le metan una bala en la cabeza o encuentre una salida honorable; y tengo una mala noticia para sus fans: No la tiene. Os vais a tener que fastidiar.
#28 El chino dice que se acaba porque sabe que occidente está en las últimas y en Agosto empieza el "ataque" definitivo a la economía occidental. Y pongo ataque entre comillas para que entiendas que es un ataque legal, dentro del marco del capitalismo de consumo que el propio occidente exportó con vehemencia a estos países.
Si la economía no tira no hay más partidas de armamento, así de sencillo y digan lo que digan los fanboys de cualquier lado.
#29 Occidente está en las últimas: Tienes razón. Llevo a dieta de hamster semanas.
Hay algunos miles de millones de euros rusos bloqueados en la UE. Adivina lo que alguno ha propuesto hacer con ese dinero.
Comentarios
#0 Como me ha parecido muy interesante y acertado el envío te adjunto su traducción al castellano
Traducción realizada con la versión gratuita del traductor www.DeepL.com/Translator
Reality check: Rusia podría ganar
La balanza se inclina a favor de Rusia
Reportajes Por Lucas Webber
Marzo de 2023
Occidente cree que la guerra en Ucrania, si no está ganada, al menos no está perdida. Que la invasión rusa ha fracasado y que la heroica defensa ofrecida por Ucrania ha sido una gloriosa hazaña armamentística que ha frustrado las ambiciones de Putin. Sin embargo, la cuestión de quién está ganando y quién está perdiendo en Ucrania no es el simple juego de moralidad que nos gustaría que fuera. Y para verlo, deberíamos empezar por el principio.
El 24 de febrero de 2022, Putin declaró el inicio de la "Operación Militar Especial" de Rusia en Ucrania mientras las fuerzas invasoras atacaban desde varios ejes. La incursión a gran escala desde varias direcciones pretendía desorientar y abrumar a los ucranianos, mientras que las fuerzas rusas amasadas alrededor de Kiev estaban aparentemente diseñadas para coaccionar al gobierno a hacer concesiones de algún tipo.
Sin embargo, este enfoque inicial fracasó y el creciente coste humano y material de mantener las fuerzas rusas en la zona hizo que Rusia se retirara. El conflicto se convirtió entonces en una guerra de desgaste -para la que Rusia estaba preparada, estuviera o no preparada para la profundidad del apoyo occidental a Ucrania liderado por los angloamericanos- y así ha seguido desde entonces. Las cosas mejoraron para los rusos a finales de la primavera y durante el verano, cuando lograron grandes éxitos en la toma de Popasna, Lyman, Lisychansk, Severodonetsk y muchas otras ciudades.
Luego, el impulso cambió de nuevo en otoño, cuando Ucrania, reforzada por esa masiva ayuda militar y financiera occidental, así como por el apoyo multifacético de inteligencia y de objetivos, identificó y explotó partes de las líneas defensivas rusas en la región de Járkov que estaban gravemente infradotadas. La oportuna ofensiva resultante obligó a Rusia a abandonar un considerable trozo de territorio para preservar hombres y blindados.
A continuación, Rusia se retiró de la orilla occidental de Kherson, en el sur, debido a la presión ucraniana y a sus propios problemas logísticos. Aunque esto les permitió simplificar su defensa y liberar hombres y equipos para utilizarlos en otros lugares. Sin embargo, hay que señalar que durante todo este tiempo la organización rusa Wagner y otros efectivos alineados siguieron avanzando en el Donbass, creando las condiciones para lo que ahora son avances acelerados en la estratégica ciudad de Bajmut y sus alrededores.
Desde que las últimas fuerzas rusas cruzaron el río Dnipro en Kherson, interponiendo una barrera natural entre ambos bandos, la guerra se ha decantado gradualmente a favor de Moscú, y Ucrania se encuentra una vez más en desventaja. Rusia ha movilizado a más de 300.000 hombres, ha estabilizado sus líneas, ha reforzado significativamente sus posiciones defensivas con personal fresco y extensos sistemas de trincheras y barreras, y ha intensificado una intensa campaña aérea estratégica que, entre otras cosas, está paralizando la red energética de Ucrania. Además, sus fuerzas están llevando a cabo una serie de ofensivas locales que se extienden desde Zaporizhzhia, en el sur, a lo largo de los territorios de la DPR/LPR, hasta las regiones de Siversk, Lyman y Kupiansk, más al norte.
La línea defensiva más fuerte y fortificada de Ucrania, que se construyó en gran medida durante la era posterior a la guerra civil de Maidan, se ha visto gravemente comprometida con la caída de Soledar y parece a punto de derrumbarse con Rusia cada vez más cerca de tomar Bajmut. Además, se anticipa ampliamente que Rusia se está preparando para lanzar algún tipo de acción ofensiva intensificada en las próximas semanas o meses, a medida que acumula enormes cantidades de personal y blindados actualmente no comprometidos en Ucrania y sus alrededores.
A pesar de su caótico y desastroso comienzo de la guerra, así como de las impresionantes hazañas de Ucrania al expulsar a sus fuerzas de partes de Kharkov y Kherson, Rusia ha consolidado sus defensas y ha pasado a una estrategia centrada en aprovechar su considerable ventaja en potencia de fuego con el propósito expreso de reducir las fuerzas armadas de Ucrania. Cuando Putin declaró la guerra y planteó la "desmilitarización" como uno de los objetivos clave de la "Operación Militar Especial", iba en serio. Las ambiciones crecen en todas las guerras, pero este objetivo ruso era real, no una cortina de humo.
Cómo se está librando la guerra
El Teniente Coronel (retirado) Alex Vershinin, del Royal United Services Institute, ha ofrecido una acertada explicación de los enfoques opuestos de ambas partes en el conflicto, describiendo cómo "los rusos están librando una guerra de desgaste tradicional centrada en la potencia de fuego", mientras que "Ucrania está llevando a cabo una guerra de maniobra centrada en el terreno". Las guerras de desgaste "se ganan mediante una cuidadosa gestión de los recursos propios mientras se destruyen los del enemigo", afirma, y Rusia "ha preservado cuidadosamente sus recursos, retirándose cada vez que la situación táctica se volvía en su contra", señalando también que Moscú "entró en la guerra con una amplia superioridad material y una mayor base industrial para sostener y reemplazar las pérdidas".
Según él, ambas estrategias parecen funcionar, ya que "Ucrania ha reconquistado grandes franjas de territorio, pero se ha agotado durante la ofensiva de otoño", y "ha sufrido pérdidas espantosas y ha agotado reservas clave de equipo y munición". Para empeorar las cosas para los ucranianos, su "capacidad para reemplazar las pérdidas y establecer nuevas formaciones de combate... se están marchitando rápidamente".
En la actualidad, Rusia controla más del 15% del territorio ucraniano, va camino de hacerse con más, posee la mayor parte de su litoral y está degradando cada vez más las infraestructuras energéticas del país. La economía ucraniana se ha visto diezmada al tiempo que el país se despoblaba, y Statista contabilizaba más de 17,68 millones de cruces fronterizos a otros países a 17 de enero de este año, con millones de desplazados internos.
Por el contrario, Rusia cuenta con una sólida base industrial militar, una población mucho mayor que la de su adversario, un mayor número de profesionales y reservas militares a los que recurrir para futuras movilizaciones, la capacidad de lanzar sistemáticamente ataques con misiles y aviones no tripulados desde dentro y fuera de su territorio, una economía que sigue funcionando y está geográficamente rodeada por Ucrania, lo que facilita las rutas logísticas y las líneas de comunicación.
El Occidente liderado por Estados Unidos insiste en que Ucrania puede recuperar todo el territorio ocupado e infligir daños suficientes para obligar a Rusia a abandonar. Washington y sus aliados han impuesto duras sanciones a Rusia con la esperanza de estrangular su economía, espolear la presión interna contra la guerra e intentar provocar un cambio de régimen en el Kremlin; algunos hablan incluso de balcanizar el país. Estos objetivos parecen descabellados por el momento, dado el apoyo de la población rusa a la guerra, las protestas que se desvanecieron hace tiempo, las sanciones que no han cumplido las expectativas y el dominio de la vecindad de Rusia en la escala de escalada.
En 2016, el presidente Barack Obama se refirió a este último punto, admitiendo: "El hecho es que Ucrania, que es un país no perteneciente a la OTAN, va a ser vulnerable al dominio militar de Rusia hagamos lo que hagamos." Esto, combinado con la realidad de que la élite moscovita percibe la crisis ucraniana como una crisis existencial, hace muy improbable que Rusia simplemente se dé por vencida, reconozca su derrota y se marche por la salida más cercana. Irse causaría más problemas a los dirigentes rusos que quedarse.
Guerra existencial
El conflicto de Ucrania es, en gran medida, una guerra por poderes y muchos la han calificado como tal. Los principales políticos y autoridades militares estadounidenses han expuesto abiertamente su deseo de expulsar a Rusia de las filas de las grandes potencias y debilitarla todo lo posible mediante una guerra contra las fuerzas ucranianas respaldadas por Occidente.
Pero en este caso concreto, la balanza se inclina a favor de Rusia, que está librando en su propio patio trasero una guerra considerada existencial. Los motivos rusos para iniciar la invasión han sido ampliamente tergiversados por la prensa y los políticos occidentales. Además, les gusten o los detesten, la cuestión de la concepción rusa de sus intereses vitales acaba de ser ignorada. Y eso es analíticamente asnal.
El 24 de febrero de 2022, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó que la invasión "siempre tuvo que ver con la agresión desnuda, con el deseo de Putin de establecer un imperio por cualquier medio necesario". Gran parte de la clase experta de Occidente está alineada con este punto de vista, creyendo que si no se detiene a Putin en Ucrania, entonces continuará inevitablemente su supuesto impulso imperialista hacia nuevas tierras. Anne Applebaum afirmó que la derrota de Kiev sumiría a la OTAN en el caos, ya que "toda la alianza se vería obligada a gastar miles de millones en prepararse para la inevitable invasión de Varsovia, Vilna o Berlín".
Estas narrativas son patentemente infundadas, ya que la realidad es que la intervención de Rusia en Ucrania fue un acto de desesperación y no de fuerza. Como explicó sucintamente John Mearsheimer, Moscú considera que la política de Estados Unidos y sus aliados europeos trata de apartar a Ucrania de la esfera de influencia de Rusia e integrarla en Occidente. Estableciendo así un baluarte occidental en la frontera de Rusia mediante la expansión
#12 Gracias, lo iba a poner yo pero estaba en el móvil y dada la longitud no me permitía hacer un copia completa desde Deepl, demasiado trabajo ir por tramos.
Pero lo dicho, gracias porque el envío lo merece
#15 De nada buen envío aunque me temo que como de costumbre pasará desapercibido, una pena.
#16 Eso ya se da por supuesto antes de enviarlo, todo lo que no sea propaganda occidental y dé la razón al relato oficial acaba hundido en pocas horas, para algo pagan a los bots.
Pero bueno, solo con que lo lea alguien ya merece la pena
#20 Aquí uno que se lo ha leído con fruición.
, se suben pocas noticias de propaganda occidental y las que se suben suelen tener unos pocos acólitos sin demasiado éxito que suelen ser los mismos que votan negativo a las noticias que cuestionan el relato occidental. El caso más sangrante y que merece un estudio a parte es el envío diario del libelo de Revistaejercitos. Existe un desnutrido grupo que comentan sobre lo que no les gusta, pero no envían contenido con el que comulguen, veteasaberporqué
. Un grupo de usuarios que no creo que pasen de 20-25, esto en casos extremos de peligro de portada, porque normalmente no pasan de 10 y casi siempre te encuentras con los mismos.
Respecto a lo que comentas sobre el hundimiento de todo lo que no sea propaganda occidental...en mi opinión es un sí pero no. Digamos que la mayoría no llega a portada PERO: los meneos en pendientes acostumbran a tener el doble de positivos que negativos, cuando no el triple. Pocas son las que cosechan más negativos que positivos. En cuanto a la portada, creo que llegan bastantes más noticias que cuestionan el relato o la propaganda occidental que las que se orientan a defender la postura occidental. También es verdad que en la cola de pendientes, veteasaberporqué
No creo que hayan bots y menos pagados. Esto es Meneame, como ellos mismos dicen, una burbuja con escasa influencia fuera del entorno. No es rentable pagar eso.
Y si te sirve de algo, yo entro a Meneame para subir el contenido que considero que debe divulgarse y para leer contenido como el que tú acabas de subir. Te deseo una larga y próspera vida
#12 Gracias por la traducción. Coincido con tu opinión, es un artículo muy interesante y acertado.
el pueblo de Ucrania, muchos más miles de personas morirán y el país tardará décadas en recuperarse.
No se podía saber.
#1 es lo que tiene que la potencia militar regional te invada, que muere gente y te destruyen el país.
Eso de “dos no se pelean si uno no quiere” es algo que se dice a niños de parvulario, en este caso si uno no quiere luchar el otro lo mata. Y veo mucho argumento a favor de que uno no luche …
#5 nadie ha argumentado que uno no luche -que yo haya visto/leído -. Muchos hemos cuestionado el tener que pagar nosotros su lucha, que es muy distinto.
#5 No sé.... me parece que España, a pesar de no estar "invadida" y a la vista de todo lo acontecido... muy soberana... digamos que no es.
#5 Cualquier gobierno que sea imprudente es un mal gobierno, independientemente de toda la retórica moral. Una invasión es una continuación de unas relaciones diplomáticas. Si Rusia era un monstruo cuando Georgia, es muy cínico pensar que ahora fuera a actuar de otra manera.
Yo me escandalizaría de quien quisiera echar a todas las bases americanas, a sus embajadores y a sus fondos de un día para otro... porque entiendo lo que es una potencia. Esto nadie lo ignora. Pero parece que hay excusas para fingir ser un ignorante dependiendo de lo sentimental que sea el discurso.
Propaganda de los Putin Boys. Están desesperados y tienen que compartir estos blogs traducidos de la propaganda rusa.
Pero aún queda alguien que piense que Ucrania tuvo alguna oportunidad de ganar?????
De coña.
#17 varios
clonesusuarios por estos lares...En estos asuntos “ganar” es absolutamente subjetivo. Estoy convencido de que cuando acabe todas las partes implicadas celebrarán su victoria con muchos aspavientos.
#2 Es una forma de hablar, claro.
#2 Discrepo. Hay una parte que
va a ganarya está ganando.Una pista: está en otro continente.
Al señor derethor que, como parece ser habitual, acusa de Putin Boy al autor del artículo...
¿Has visto el medio que es piltrafilla? ¿Qué Putin Boys ni que leches? Si es un medio conocido de UK
Lo de esta gente clama al cielo
#13 A mi, que me apoyen gente como Elenita la de arriba, me daría más miedo que otra cosa, francamente
"Deberíamos saber qué queremos de Ucrania antes de que mueran muchos más"
Lo sabrán los ucranianos que son los que defienden su país del fascista de Putin. Como cualquier pueblo tienen el derecho de defenderse de un invasor.
Por eso el mundo libre apoya a Ucrania, mientras que a Rusia y al fascista de Putin solo le apoyan 4 países antidemocráticos y algunos fascistas llorones.
#8 También le apoya la izquierda populista. Los resentidos porque Cuba y Venezuela son un fracaso.
#10 Gente muy confundida en general, la mayoría de ellos demasiado viejos para ver que Rusia no es la URSS o demasiado jóvenes para distinguir la hoz y el martillo de un bitcoin.
#8 El Mundo Libre ™ apoya a Ucrania para joder a Rusia, no para ayudar a Ucrania. Se nota que te has leído el artículo y, sobre todo, que no debe iros muy bien con la propaganda cuando hasta el Washington Post ya os va avisando...
#19 El mundo libre apoya a Ucrania porque Rusia es un país amenazador, imperialista y expansionista, dirigido por un fascista que intenta perpetuarse en el poder y que lleva una buena temporada intentando interferir en los asuntos de otros países (seguramente para tapar sus problemas domésticos).
Como contrapartida no dejes de fijarte en que solo hay 4 países que apoyan a Rusia, casualmente socios del club antidemocrático.
Y el Washington Post manda un mensaje que ni te has parado a entender: NO es que Rusia vaya a ganar, sino que si no se sigue ayudando o se incrementa la ayuda a Ucrania, podría hacerlo.
#21 Claro claro, no es que el ejército ucraniano esté en la mierda, que lo está, es que si no seguimos enviando dinero y armas seguro que pierden, pero si seguimos enviando tardarán algo más en perder
Lo vuestro es digno de estudio, sinceramente, pero tranquila que ya queda poco, si los chinos dicen que esto se acaba para otoño lo más probable es que se acabe en otoño, esa gente no usa información de segunda categoría de la que te gusta tanto
#27 ¿con las cagadas de los rusos semana a semana? No se si Ucrania perderá, pero mientras el tiempo corre para el fascista de Putin. Si el chino (sí, es un dictador) dice que se acaba, da igual, porque el fascista de Putin no va a ceder hasta que le metan una bala en la cabeza o encuentre una salida honorable; y tengo una mala noticia para sus fans: No la tiene. Os vais a tener que fastidiar.
#28 El chino dice que se acaba porque sabe que occidente está en las últimas y en Agosto empieza el "ataque" definitivo a la economía occidental. Y pongo ataque entre comillas para que entiendas que es un ataque legal, dentro del marco del capitalismo de consumo que el propio occidente exportó con vehemencia a estos países.
Si la economía no tira no hay más partidas de armamento, así de sencillo y digan lo que digan los fanboys de cualquier lado.
#29 Occidente está en las últimas: Tienes razón. Llevo a dieta de hamster semanas.
Hay algunos miles de millones de euros rusos bloqueados en la UE. Adivina lo que alguno ha propuesto hacer con ese dinero.
Gota a gota vertiendo un nuevo relato, veremos en qué queda.
También podría perder, vaya mierda de titular.