Un estudio llevado a cabo por la psicóloga Nadia Chernyak y su equipo de la Universidad de California constató que hasta los siete años de edad los niños no se percatan de que tienen que devolver un favor. En general, los más pequeños se comportan de manera altruista, pero no necesariamente con los bienhechores. Del mismo modo, tampoco esperan ningún acto de agradecimiento directo. En resumen, aunque con tan sólo tres años y medio los niños ya conocen la norma de la reciprocidad positiva no la relacionaban con ellos mismos.
Comentarios
Un favor se hace sin esperar nada a cambio, no intentéis lavar el cerebro a los críos...
#2 Vaya películas te montas. El artículo no dice que haya que hacer favores esperando algo a cambio. Sólo señala que a los niños no le surgía el pensamiento de devolver un favor. Tampoco les surge espontáneamente el pensamiento de lavarse después de hacer sus necesidades, pero eso no significa que esté mal enseñarles a que se limpien.
#5 Y porque devolver?
#6 Agradecimiento.
#7 A los críos generalmente todos procuramos ayudarlos, porque iban a pensar que deben una y no que todos nos ayudamos sin necesidad de esperar nada a cambio?
¿Quién dice que los favores se devuelven?
#1 Nunca has escuchado eso de
María ¿hacemos un 68?
¿Un 68? Será un 69.
No no, un 68, tú me la chupas y yo te debo una...
#1 Dices que si te hacen un favor no hay que devolverlo. Deber de ser muy agradable convivir contigo.
#4 Pues hago favores sin esperar nunca nada a cambio.
#11 Me parece muy bien, pero si yo le pido un favor a alguien y simplemente no quiere hacerlo entonces que no pretenda luego que yo se lo haga. Reciprocidad. Es algo muy habitual entre amigos y socios. Incluso Aristóteles hablaba de ello en sus tiempos.
Puede ser bastante porque puede hacer favores desinteresadamente y tu tambi´ñen y va a beneficiar a ambos porque ninguno se cortará o eludirá trato
pero van mejorando el trato con quien mejor los trata. Y eso es precisamente el pago, no el buscar y valorar un favor puntual para pagar otro uno a uno sino variar el trato continuado con unas personas u otras