Se ha pasado de un afectado por cada 2.500 habitantes a uno por cada 170. Hace no muchos años se consideraba que había un niño autista por cada 2.500 habitantes. Ahora esta cifra ha aumentado a un chaval con esta patología por cada 170 ciudadanos. Y, según el último estudio realizado en Aragón, hay 155 chavales afectados, lo que supone 9,21 casos por cada 10.000 habitantes. Las causas son muchas, pero la mayoría implica mejoras en el diagnóstico y en la detección de los casos.
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Como dice la noticia mas que un aumento del número de casos como tal lo que ha pasado es que cada vez hay mas profesionales que saben detectar este trastorno. Hasta hace poco tanto médicos como padres eran muy reticentes a aceptar el autismo y diagnosticaban en muchos casos retrasos madurativos(que el niño tenía un retraso en el proceso de maduracion en relación con niños de su edad) creando esperanzas de recuperación pero que hacían que no se tratase adecuadamente al niño. Conforme se ha ido conociendo mas sobre este trastorno, hay muchos especialistas que conocen mejor los síntomas y los métodos de detectarlo.
No obstante la cifra es preocupante, ya que luego no hay medios para atender a estos niños o los que hay son a todas luces insuficientes.
Si te parecen pocas estas sintomatologias..
El autismo es un conjunto de síntomas, por eso se habla de síndrome de autismo. No hay dos autistas iguales. No es una enfermedad, pero sí un trastorno profundo del desarrollo que se muestra en:
- Alteraciones de la comunicación y del lenguaje.
Señal de alerta: Muchos hablan de bebés (agua, bababa, papa, tata, mama, toma...), pero en cierto momento dejan de hablar, se vuelven “mudos”, aunque entienden en muchas ocasiones qué se les dice.
Si hablan, repiten una y otra vez las mismas frases, les interesan sólo determinados temas, hay ecolalia (repiten una y otra vez lo que acaban de escuchar), entienden todo al pie de la letra, no entienden la ironía, un chiste, un doble sentido..., hay cierta musicalidad en la forma de hablar, confunden las formas “yo” y “tú”,
- Problemas en las relaciones sociales.
Señales de alerta: falta de contacto visual o muy escaso, no responden al nombre, parecen “sordos”, mirada perdida, sensación de soledad, no señalan, no siguen la mirada cuando se les señala un objeto, no comparten lo que hacen, no llaman “papá” o “mamá”, no dicen adiós con la manita, no imitan (las palmas, cinco lobitos...), no reaccionan o se alteran muchísimo cuando alguien entra en la habitación donde están, parecen no sentir dolor cuando se golpean, lloran/gritan muchísimo sin motivo aparente, lloran sin lágrimas, movimiento continuo, aleteo de brazos, incapacidad de sentarse en una mesa, en un sofá..., tienen problemas con el contacto corporal, falta de expresividad facial,
- Falta de flexibilidad mental y de comportamiento. Hay una ausencia de juego simbólico y de las capacidades de abstracción, imaginación o improvisación.
Señales de alerta: juega distinto, da vueltas y vueltas a la rueda del coche, alinea los objetos, no hace juegos de rol (cocinar, dar de comer a la muñeca, etc.), no juega “como si...” (coger una banana como si fuera el teléfono), no puede permanecer solo jugando, no tiene iniciativa, hay que orientarle continuamente, le fascinan las luces, los reflejos en la pared, las estructuras, las baldosas, los objetos que giran..., muestra intereses muy concretos, casi obsesivos (las tuberías, el agua que entra y sale, los tubos de escape, los objetos de chapa, los cables, etc.), presenta hipersesibilidad a determinados sonidos, luces, olores, texturas.
El diagnóstico no es fácil. No siempre hay autismo aunque coincidan muchos de los síntomas. Otro niños parece que tienen un desarrollo “normal”, pero a partir de los dieciocho meses muestran una regresión en aspectos aprendidos. Lo mejor ante cualquier señal de alarma es consultarlo con el pediatra.
#3, no hay variedad de autismos, existe el espectro autista, que es diferente. Dentro del espectro encontrarás a gente con autismo clásico o nuclear, con retraso mental asociado, con hiperactiviad o hipoactividad asociada, con alta funcionalidad, con Asperger (que se considera la forma más leve del autismo) etc,...
El problema está en la variedad de autismos existentes. No hay una sintomatología típica a la que observar.