Hace 11 años | Por jelcacho a nosinmimochila.com
Publicado hace 11 años por jelcacho a nosinmimochila.com

La primera queja nos llegó la semana pasada. Y después le han sucedido otras más. Son clientes de entidades bancarias a los que les colocaron un producto financiero para sus ahorros que supuestamente no era arriesgado aunque luego el tiempo ha demostrado lo contrario. Son las Aportaciones Financieras Subordinadas de Eroski y Fagor que fueron comercializadas por distintos bancos. Según la...

Comentarios

wanakes

Cualquier persona medianamente formada debería sospechar que las participaciones en empresas cooperativas no son tan líquidas como las acciones normales, o otros tipos de valores negociados. Si su liquidez no aparece claramente destacada en el folleto informativo, parece evidente que hay que sospechar.

Es cierto que muchos bancos se aprovechan de la ignorancia y confianza de sus clientes, y les recomiendan esos productos; pero es que es importante leer las condiciones de lo que se está comprando. Moralmente puede haber casos reprobables, pero la responsabilidad final es del cliente que contrata...

tollendo

#0 Se trató el tema aquí Las “preferentes” abertzales (nacionalistas).

Hace 11 años | Por Dodise a navarraconfidencial.com
pero fue descartada por sensacionalista.

m

Yo tengo tanto de Fagor, como de Eroski, y en Caja Laboral donde las subscribí siempre me dijeron lo mismo... Que era un producto con una liquidez limitada, que si que aseguraba los intereses, "pero que podías tardar en vender", y solo era recomendable para "el dinero que no fueses a tocar en mucho tiempo".

kampanita

#3 en tanto tiempo como el necesario para que cuando vayas a rescatar el capital este tienda a ser 0.

t

Como en Bankia, esto es fácil: si el banco te mintió y te dijo que era 100% seguro, al juzgado a denunciar por estafa, que está muy claro. ¿Que resulta que bueno, que es que no me leí la letra pequeña, pero no hay derecho porque el del banco parecía buena gente y además me regaló un boli? Pues a joderse y a pensárselo mejor la próxima vez.

Qué ganas de complicar las cosas.