El responsable de la Agència Catalana del Consum ha planteado una sorprendente medida disciplinaria contra las operadoras de telefonía móvil y de internet cuando acumulen un número excesivo de reclamaciones de consumidores. Consiste en solicitar ante la justicia el cese de la actividad. Nada menos que el 60% de las reclamaciones tramitadas por la ACC tienen que ver con el servicio que prestan las operadoras móviles y fijas. Una tendencia que además va en aumento cada año.
Comentarios
Pues con todas las operadoras cerradas habrá que recurrir al tam-tam.
#1 Sí, mucho mejor dejar que una empresa privada pisotee nuestros derechos, no vayas a quedarnos sin llamar.
O igual a alguna operadora le interesa mantener el negocio en Cataluña y se pone las pilas para variar.
Aiba! esto si que es interesante. A ver si es verdad que se van al carajo la mitad de las operadoras chupasangres y estafadoras
Me sorprende que no esté en portada.