Hace 18 años | Por Charliter a blogs.baquia.com
Publicado hace 18 años por Charliter a blogs.baquia.com

Guardias de seguridad, registros en la entrada, patrullas dentro de la sala... Esta historia demuestra que ir al cine se está convirtiendo (al menos en los EEUU) cada vez más en un deporte de riesgo. ¡Y luego habrá quien se sorprenda de que cada año haya menos espectadores!

Comentarios

Liamngls

#2; Mira que si se les da por poner la bomba al vecino de abajo porque escucha la música muy alta .... yo creo que deberías irte a vivir a un hotel una temporada, por si acaso.

http://botellamar.blogspot.com/2005/10/conspiranoia.html

vicious

El día que lo empiecen a hacer aquí, presuponiendo que seamos todos posibles pirateadores de películas, y me intenten si quiera cachear, el segurata de turno va a dormir en los calabozos de Plaza Castilla al menos una noche, de eso me encargo yo.

manolo

Leyendo el artículo. Si pasase aquí, primero no me dejaría cachear. Si no puedo entrar en la sala sin que me cacheen, que me devuelvan el dinero. Si además no me dejan ver la película con el movimiento de gente, me largo y que me devuelvan el dinero o les pongo una hoja de reclamaciones. Por supuesto, en cualquiera de los casos, no volvería a pisar el local. Y mira que me gusta ir al cine, pero eso ya es pasarse. No se como no son conscientes de que tienen que mimar a sus clientes en lugar de tratarlos como delincuentes.

A #2, por esa regla de tres, deberían cachearte al entrar al mercado, al centro comercial, al estadio de fútbol, al gimnasio, al edificio de oficinas, en los cruces con calles muy transitadas... Si total, es por nuestra seguridad...

ElGranOli

A mi personalmente me parece bien, siempre y cuando el motivo sea la seguridad. Yo voy habitualmente a kinepolis y se me ha pasado mas de una vez por la cabeza que ocurrra si aun pirado se le ocurre poner una bomba o similar. Sería una catastrofe sin precedentes.