En el libro "La Generación Precaria" la autora describe en este foro una juventud para la que los problemas son muchos y variados que echa abajo el tópico de consumistas fiesteros y despreocupados. Según Marta García, una buena formación, empleos precarios y la dificultad del acceso a la vivienda son las características que compartimos los jóvenes entre 20 y 35 años. En contra de los que subrayan el tandem jóvenes-fiesta-consumo los jóvenes de La Generación Precaria se preguntan ¿y el alquiler? ¿las becas abusivas? ¿los salarios mierdaeuristas?
Comentarios
Yo creo que somos consumistas, fiesteros y todo eso... pero al mismo tiempo concienciados de nuestra situación, de los problemas del mundo y de la corrupción política. Pero la mayoría de la gente o se ve impotente o no quiere hacer el esfuerzo. Véase lo que está costando que vaya más gente a las manifestaciones por la vivienda. Hay gente que ni siquiera pone su granito de arena, con lo poco que cuesta.
Y la excusa de que al primero que se mueva lo despiden... pues será si es el único que se mueve. Lo que hace falta es que no haya nadie disùesto a vivir en esas condiciones sin moverse.
Somos muy cínicos/perezossos, y a lo mejor tenemos lo que nos merecemos.
"Desde La Bola de Cristal en la que oíamos aquello de "Viva el mal, viva el capital" a la escuela de los que fuimos niños en los ochenta y cómo la película que nos contaron no se han hecho realidad. Cumplimos nuestra parte del trato, que era la de hacer los deberes ¿Y ahora qué?"
kilgram, tienes razón, pero también la escritora. Imagina por un momento que todos los que tienen/tenemos un contrato de mierda hiciéramos huelga. El país se para en ese mismo momento.
A ver quién es el guapo que se rebela... La gente está que tiembla mirando por su [sitio donde la espalda pierde su casto nombre] y nadie mueve un dedo, no vaya a ser que le despidan. Las demagogias de escritoras que se ganan la vida escribiendo sobre las miserias de los demás, están muy bien para ganar notoriedad de cara a vender más libros, pero la realidad es otra.
Yo no estoy deacuerdo Kilgram, con que escribir sobre problemas sociales sea sacar partido de desgracias ajenas. Sinceramente, no creo que un libro destinado a los precarios tenga como destino un mercado con el que uno se quiera forrar. He leido un poco del libro que circuka por Internet y tiene buena pinta. Soy quinientoseurista, así que no puedo permitir comprármelo. Pero la verdad, prefiero que se escriban libros sobre mi situación para que los que sí tengan pasta y se lo puedan comporar se enteren de cómo está el patio.Yo me he sentido my identificada con lo que leí y además consiue sacar una sonrisilla... Escribir sobre la Pantoja y mierdas de ésas sí que da para forrarse.´¿Es que eso es más digno que denunciar una realidad social? Vaya mierda de país, que critica a los que se preocupan por denunciar injusticias.