Cada vez que conocemos un nuevo caso de violencia, doméstica, escolar o social, en que el agresor se ha suicidado (o lo ha intentado) tras matar a su pareja y/ o a otros familiares o ciudadanos, nos preguntamos por la aparente inutilidad de su gesto posterior. ¿Por qué no se suicidó primero, si estaba tan desesperado, y hubiera evitado así la muerte de otras personas?
En todo caso es un fracaso personal extremo. Estoy por dejar de criminalizar a esas personas e intentar empezar a comprender los motivos profundos que pueden llevar a una persona a una situación tan infernal como la de tener que matar a alguien a quien has querido y después atentar contra tí mismo. Porque lo que no cabe duda es que los suicidios son intentos reales, no fingidos, como suele ocurrir en otro tipo de patologías.
Para mí hace falta compender más y criminalizar menos
Yo me había hecho muchas veces la misma pregunta, hasta que en algún sitio (no recuerdo dónde) leí la respuesta.
Y la realidad es mucho más simple que la paja mental del artículo éste. La realidad es que, en la mayoría de los casos de violencia doméstica, el agresor no actúa a sangre fría sino impulsado por un arrebato de ira irracional, sin medir por tanto las consecuencias de lo que hace. Tras cometer el homicidio, cuando se da cuenta racionalmente de lo que ha hecho, sufre un ataque de culpabilidad y desesperación que le lleva a suicidarse. Por eso no se suicidan primero: porque el motivo para suicidarse es lo que acaban de hacer previamente.
Pues porque si se suicidasen desde el principio como mucho engrosarían la lista de suicidios. Si primero matan a otras personas (siempre gente inocente y que pasaba por ahí) la gente le recordará, vale, como "el hijoputa que se cargó a 5 personas y luego se suicidó, en vez de suicidarse primero e intentar matar a 5 personas", pero le recordará. Es decir, de una vida totalmente gris e insustancial (todos los vecinos suelen decir que él era una bellísima persona y que nadie había sospechado que siquiera pensase en violencia)se quiere ir siendo recordado por gente ajena a su círculo de amistades.
Lo que no saben es que la gente olvida tan rápidamente que no merece la pena hacerlo. Y si no lo hiciesen, lo que le restase de familia no ganarían suficiente como para restaurar tantas veces la tumba del agresor, ya que la gente lo destrozaría día y noche...
Es una mezcla de egoismo y cobardía.
Yo no me quito la vida, hasta que se la quite a otros.
Cuando me asusto por lo que he hecho entonces si me la quito.
Muy buena observación la del titular, me ha recordado una excelente canción del maestro Brassens que habla de otra cosa pero que tampoco viene mal tener presente, se llama "Mourir pour des idées"
O vous, les boutefeux, ô vous les bons apôtres
Mourez donc les premiers, nous vous cédons le pas
Mais de grâce, morbleu! laissez vivre les autres!
La vie est à peu près leur seul luxe ici bas
Comentarios
Porque están mal de la cabeza. La gente cuerda no se dedica a asesinar ni a apalear a la gente de forma sistemática.
En todo caso es un fracaso personal extremo. Estoy por dejar de criminalizar a esas personas e intentar empezar a comprender los motivos profundos que pueden llevar a una persona a una situación tan infernal como la de tener que matar a alguien a quien has querido y después atentar contra tí mismo. Porque lo que no cabe duda es que los suicidios son intentos reales, no fingidos, como suele ocurrir en otro tipo de patologías.
Para mí hace falta compender más y criminalizar menos
Yo me había hecho muchas veces la misma pregunta, hasta que en algún sitio (no recuerdo dónde) leí la respuesta.
Y la realidad es mucho más simple que la paja mental del artículo éste. La realidad es que, en la mayoría de los casos de violencia doméstica, el agresor no actúa a sangre fría sino impulsado por un arrebato de ira irracional, sin medir por tanto las consecuencias de lo que hace. Tras cometer el homicidio, cuando se da cuenta racionalmente de lo que ha hecho, sufre un ataque de culpabilidad y desesperación que le lleva a suicidarse. Por eso no se suicidan primero: porque el motivo para suicidarse es lo que acaban de hacer previamente.
Es óbvio: Porque el suicidio es pecado.
Porque están tan enfermos, ciegos y son tan malas personas que sólo quieren hacer dano.
Si solo te suicidas no sales en la tele.
Pues porque si se suicidasen desde el principio como mucho engrosarían la lista de suicidios. Si primero matan a otras personas (siempre gente inocente y que pasaba por ahí) la gente le recordará, vale, como "el hijoputa que se cargó a 5 personas y luego se suicidó, en vez de suicidarse primero e intentar matar a 5 personas", pero le recordará. Es decir, de una vida totalmente gris e insustancial (todos los vecinos suelen decir que él era una bellísima persona y que nadie había sospechado que siquiera pensase en violencia)se quiere ir siendo recordado por gente ajena a su círculo de amistades.
Lo que no saben es que la gente olvida tan rápidamente que no merece la pena hacerlo. Y si no lo hiciesen, lo que le restase de familia no ganarían suficiente como para restaurar tantas veces la tumba del agresor, ya que la gente lo destrozaría día y noche...
El ser humano es complejo. Antes que caer en desgracia solo, jala a los demás.
Es una mezcla de egoismo y cobardía.
Yo no me quito la vida, hasta que se la quite a otros.
Cuando me asusto por lo que he hecho entonces si me la quito.
Muy buena observación la del titular, me ha recordado una excelente canción del maestro Brassens que habla de otra cosa pero que tampoco viene mal tener presente, se llama "Mourir pour des idées"
O vous, les boutefeux, ô vous les bons apôtres
Mourez donc les premiers, nous vous cédons le pas
Mais de grâce, morbleu! laissez vivre les autres!
La vie est à peu près leur seul luxe ici bas