Hace 14 años | Por --140519-- a elmundo.es
Publicado hace 14 años por --140519-- a elmundo.es

Tras vivir toda su vida en una chabola del poblado de Santa Catalina (al sur de Madrid), Isidoro puede probar por fin las mieles de un piso normal. Puede disfrutar del agua corriente sin necesidad de 'pincharla a alguna parte' y no va a sufrir el frío invernal al calor de un bidón con aspecto de chimenea. Tampoco tendrá que compartir el baño con otras 20 personas. Sólo tendrá que hacerlo con su mujer y sus dos hijas pequeñas. Ellos son una de las cinco familias gitanas que han cambiado su chabola por un piso de la Comunidad de Madrid.

Comentarios

brokenpixel

a ver lo que tarda isidoro en volver a otra chabola en cuanto haya vendido la vivienda..y el ciclo volvera a comenzar..que exagero? ....ingenuos..

D

Yo lo metía en la cárcel por tener los cojones de ponerse a tener hijos mientras vive entre cucarachas.

t

Un insulto para cualquiera que tenga que matarse a trabajar para pagar su casa. Matarse a trabajar, depresión, angustia, se te caiga el pelo, te aumente la tensión hasta niveles peligrosos, endeudarte de por vida, trabajar para enriquecer al jefe o al banco...

El artículo por lo demás sensacionalista. A dar penica.

D

...y todo sin tener que hiopotecarse por 30 años, como el resto de gente que decidió no vivir como gitanos del siglo pasado.

Sin acritud, pero Isidoro no se ha ganado esa vivienda.

sarrasalmus

Y esto ha sido otro episodio de "LA GENTE DE BART".